El historiador y profesor de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM)
Benito Díaz, señala que el triple asesinato se produjo en el trayecto que une los municipios de Oropesa y Talavera de la Reina, donde los tres jóvenes, de las JSU pero ataviados con uniforme militar, detuvieron al coche en el que viajaba Gabaldón para subirse a él y dispararle después en un cañaveral cercano junto a su hija y el conductor, cuyos cuerpos fueron encontrados tres días más tarde, el 31 de julio. Gabaldón vendría del municipio de Puente del Arzobispo, donde se estaba construyendo una casa.
"Creo que el asesinato, que fue un crimen atroz y sanguinario, pudo ser una causalidad", apunta Díaz sobre las causas que pudieron llevar a estos tres jóvenes a matar a este guardia civil perteneciente al Servicio de Información de la Policía Militar (SIMP)
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Sin ese atentado podemos aventurar que la mayoría de esos 70 fusilados se habrían pasado una temporada en la cárcel y poco mas, como tantos otros. Pero siendo Gabaldón un espía infiltrado que seguramente fue uno de los que permitió esas detenciones está claro que le tenían entre ceja y ceja.
Te das cuenta, ¿no? El pobre chófer y su hija fueron encontrados tres días más tarde, con evidentes signos de tortura. Pero la construcción del relato de este tipo pasa de puntillas sobre tal hecho, dejando en un limbo semántico como un cuando murieron. "Dispararle" (no "dispararles"), pero "junto a su hija y el conductor", dejando caer que murieron a la vez, pero sin decirlo porque sabe que no es cierto. Porque eso abriría la puerta a preguntarse por qué no los mataron en ese momento también, y deducir que quisieron divertirse un tiempo con ellos. Y la izquierda son seres de luz y no hace tales cosas. Solo "ajustician" a un malvado franquista que "estaba elaborando un documento sobre comunistas y franquistas". Por cierto, que esa frasecita también es un sospechoso copia-pega que comparten muchos medios. Curioso que se limiten a repetor como loros lo que "alguien" les pasa.
En realidad, ese "documento sobre el comunismo y la masonería" era una libreta con anotaciones que llevaba encima el comandante y que exhibieron como trofeo a posteriori. Único crimen constatable de Gabaldón. Y se desconoce que crímenes pudieron cometer su hija y el pobre chófer, al que nadie menciona.
Por cierto, como parte de la misma estrategia, se cuelan errores biográficos de las víctimas, mucho me temo que intencionandamente. Errores que me han llevado a equivocación incluso a mi. Por ejemplo, el señor Gabaldón no era coronel, sino comandante. Una graduación superior parece poder justificar su asesinato como "pieza clave". También se dice que iba en "misión oficial". En realidad, volvía de comprar un jamón en Oropesa. jamón del que dieron buena cuenta los asesinos en el mismo lugar del crimen. También aparece la edad de la hija como de 17 años en algunos sitios, y de 18 en la mayoría de los que pretenden justificar el atentado para así diluir la responsabilidad de estas chicas. Como si la mayoría de edad hiciera menos atroz su asesinato. En realidad tenía 16. Y vio como descerajaban un tiro en la nuca a su padre, como comían jamón entre risas a pocos metros de su cadáver, como se la llevaron, violaron y torturaron para asesinarla dos días después. Recordemos. Dieciséis años. El chofer, Luis Díaz Madrigal, tenía 23 años (no 21), y fue reclutado forzosamente a pocos meses de acabar la guerra al entrar los nacionales en su pueblo.
Y si, las "rosas" no participaron directamente en este crimen, pero si su organización. Organización que las utilizaba precisamente por su apariencia de candor e inocencia para realizar actos tremendos, como el transporte de explosivos por el que fue detenida una de ellas (Ana López Gallego), con el que pretendían atentar contra el público asistente al desfile de la victoria, y en el que según sus propias palabras, buscaban
"el mayor número de muertos posible". O Josefina López, en cuya casa se organizaban las reuniones clandestinas de las JSU. O Carmen Barrero, coordinadora y miembra del comité ejecutivo. Vamos, una de las que tomaba las decisiones de a quién iban a matar. Ni eran rosas, ni eran inocentes. Ninguna de ellas. Lo cual no justifica obviamente que las fusilasen, pero ya cansa el discursito necio de su candor y la demonización de una parte para canonizar a la contraria. Cuando todos eran unos hijos de puta.