El Gobierno celebrará un funeral de Estado a Blas Piñar en el que prohibirán la entrada a los negros
Murió Blas Piñar. El corazón del que fuera uno de los iconos de la ultraderecha dejó de latir a la tierna edad de 95 años. La familia ha comunicado su intención de dar el último adiós al líder franquista en una ceremonia íntima. Por eso, el PP oficiará un funeral de Estado en su honor al que no podrán asistir inmigrantes.
Blas Piñar fue ante todo un patriota. Un defensor de la Gran España unida en la todos los españoles tenían cabida. Excepto los comunistas. Y los republicanos. Y los judíos, los masones, los ateos, los catalanes, los vascos, los negros, los moros, los maricones, las lesbianas, los ingleses y en general cualquier persona que no opinara que Franco era un semidiós poseedor de un pene mágico del que manaba un néctar que curaba el reuma.
El fundador de Fuerza Nueva nunca escondió su admiración por el dictador Francisco Franco. Él mismo se definió como “una directioner del Caudillo”. Piñar dedicó su vida a luchar contra las calumnias que se vertieron sobre el dictador. Esta actitud le reportó muchos enfrentamientos. Especialmente contra aquellos que afirmaban que Franco tenía el culo blanco, y que se fue a París, y se le puso gris.
El anuncio del funeral de Estado en memoria de Blas Piñar está levantado ampollas. Las fuerzas de la izquierda se oponen frontalmente a la celebración del acto. Aseguran que lucharán para que no se celebre, y que lo harán con la misma fuerza con la que, mientras vivió, le toleraron la apología de un régimen dictatorial. Se va un patriota. Se quedan sus 43 nietos.
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el jueves )