UN CEMENTERIO DE 2002
El vertedero comenzó en Seseña en 2002. Se encuentra a apenas 400 metros de la
megaurbanización, construida en pleno boom del ladrillo por Francisco Hernando El Pocero,destinada en un principio para que vivieran 40.000 personas.
En 2003, el
cementerio de neumáticos fue declarado ilegal por no respetar las normas medioambientales y los expedientes administrativos se acumulaban. La empresa que lo gestionaba, Disfilt SA. constituida en 1990, contaba con cuatro trabajadores y su especialidad era la fabricación de neumáticos y cámaras de caucho, además de la reconstrucción y recauchutado de neumáticos. Una sentencia judicial en enero de 2009 condenó al propietario por un delito contra el medio ambiente. Desde 2011 no hay nuevos vertidos y esa empresa no continuó. La relevó Gestión de Desechos y Ruedas Iberia que tiene los permisos necesarios.