Y los problemas que permite resolver son por ejemplo:
- Que Catalunya pueda decidir sobre sí misma (educación, lengua, etc.) y continuar existiendo como tal.
- Acabar con un desequilibrio fiscal insostenible.
- Escapar de un sistema político corrupto y pseudodemocrático.
Lo que comentas de "la ineptitud de los gobernantes catalanes" en parte está relacionado con el tercer punto, pues inevitablemente el sistema político autonómico catalán no es más que una parte del sistema español (sistema judicial de dudosa eficiacia e independencia, entramado administración-empresas, sistema de partidos que favorece la corrupción, con listas cerradas y financiación oscura, etc.).
Un nuevo Estado sería una oportunidad para Cataluña, para organizar las cosas de otra manera. Se acabaría la excusa de Madrid y habría más exigencia con los partidos. Y pienso que podría ser (o debería ser) tambíen un revulsivo para que España hiciera lo mismo y fuera sostenible por ella misma.