La economía de la región se basa, tradicionalmente, en la agricultura, dominada por la arboricultura (melocotoneros, albaricoqueros, cerezos)y las hortalizas, especialmente la producción de alcachofas, y la viticultura. En este aspecto, los Pirineos Orientales se distinguen por una importante producción de VDN (vinos dulces naturales), con cuatro denominaciones prestigiosas: Banyuls, Maury (Vino), Rivesaltes, Muscat. Se producen, asimismo, distintos vinos secos AOC, tintos principalmente, cuya denominación Collioure es, sin duda, la más conocida. La ganadería en retroceso durante muchos años, vuelve a revitalizarse, particularmente en lo que concierne al ganado bovino. De todas formas, y exceptuando a los temporeros, son apenas 8.000 personas las que se dedican a la agricultura. La industria, escasa, no constituye una fuente importante de ingresos para el departamento que contabiliza un alto porcentaje de paro (más del 15% de la población activa). La mayoría trabaja en el sector terciario: administración, servicios, turismo.