Yo es que estoy bastante de acuerdo en esa idea, que Rusia metiendo misilazos en Leópolis se arriesga a que pueda haber un incidente al otro lado, que es territorio OTAN. Y por otra parte, pues... no creo que su estrategia vaya a cambiar la voluntad de la población ucraniana, sino que más bien la hacen más fuerte según podemos extraer de la historia bélica.
A ver, mi profesor de Propaganda en la Universidad, Juan Pablo Sapag decía que bombardear es una forma de propaganda en el sentido de intentar quebrar mediante el miedo la voluntad de la población. Estamos hablando por ejemplo de los ataques sobre Londres en la II Guerra Mundial. Esto obviamente no se aplica a Dresde y el fósforo blanco, cuándo los alemanes estaban derrotados.
Igual que Rusia en cierto modo. Los objetivos de esta guerra en tres días se demostraron imposibles, y se vieron encarcelados en su propia propaganda. Y cada vez se hunden más y más en el fango. Porque el hecho incontestable, por mucha luz que quieran cortar a los ucranianos, es que Ucrania tiene una inercia que no tiene el ejército ruso que no sabe ni que objetivos tienen, y llevan meses para tomar villorrios y cantan sus victorias por avanzar farolas en cada uno de ellos. Ayer tomarían alguna papelera más en Bajmut... pero el hecho es que tarde o temprano, más bien temprano, los ucranianos tomarán Svatove y de ahí ya tiras a recuperar Severodonestk y Lisichiank, Lugansk y frontera... Pero no es que estén cerca de Svatove, no lo contemos por ciudades... quién tendrá a tiro para dejar a la zona ocupada sin trenes y cargarte polvorines será Ucrania... Ahora, mantenlos allí si puedes.