Yo, repito de lo que dije hace unas semanas cuando se discutió esto, creo que la Religión no es la raiz de todo mal, y que la raiz del mal es el MIEDO; el problema es que la religión ha sido a menudo el instrumento ideal para darle una especie de lógica al miedo, y para que una élite de sacerdotes/chamanes/loquesea implante un sistema de "vasallaje" y permisos especiales para ellos, puesto que ellos pueden interceder por Dios/los dioses/espíritus para congraciarse con Zeus o perdonar los pecados de la plebe y darles la tranquilidad espiritual que ansían; es decir, que a menudo la religión ha sido un efectivo medio de control de masas.
Por otro lado, creo que no es dios el que hace a los hombres a su imagen y semejanza, sino que son los hombres los que hacen a dios a su imagen y semejanza; una buena persona creyente creerá en un dios benevolente y misericordioso, una persona temerosa, mezquina o malvada creerá en un dios castigador y vengativo; es curioso que el Dios que nos vende Cristo es precisamente el primer caso, un Dios misericordioso y bueno que lucha contra las cadenas del miedo, y sin embargo las religiones cristianas institucionalizadas terminaron por instaurar todo un sistema de pecados, penitencias y castigos morales e incluso físicos, es decir, toda una parafernalia de miedo para predicar, supuestamente, su palabra.
El otro gran problema es que, por cada creyente de una espiritualidad auténtica que realmente ha llegado a una iluminación sana, hay mil maestrillos que se limitan a repetir dogmas y consignas, personajes adoctrinados que se dedican a adoctrinar a otros, llegando a límites bochornosos, caricaturescos y a menudo trágicos: en la historia de la Iglesia Católica, que es la que conozco más a fondo, podemos encontrarnos subnormaildades tales como guardar las cacas del papa en un relicario, o la curia vaticana discutiendo durante décadas acerca del sexo de los angeles, y cosas más terribles como las abominables torturas físicas y psicológicas de la inquisición.