LA TERNURA DE LOS LOBOS (1973) de Ulli Lommel
Pelicula que nos relatan la historia real de Fritz Haarmann, el carnicero o vampiro de Hannover (que inspiró también el "M" de Fritz Lang, aunque ahí le cambiaron el nombre y lugar de fechorias), asesino en serie homosexual, canibal, que mató a varias decenas de niños y jóvenes y vendía luego la carne en el mercado negro, todo con casi total impunidad, pues actuaba como informador para la policía (todo ello más explícito en esta película que en la de Lang, como es de esperar). Quien conozca a Lommel por fabricar series z contemporáneas (que le han válido el calificativo de "peor director de la historia" superando a Uwe Boll) e incluso sus (sólo un poco) menos destrozadas por la crítica y público películas ochenteras (aunque a mi me gusta "Olivia dulce asesina"), se sorprenderá viendo este film, que adopta un correcto estilo visual y narrativo muy centroeuropeo de los 70, a lo R.W.Fassbinder, el cual de hecho produce el film y hasta tiene un papelito. Mucha fijación en la normalidad y cotidianidad (y por supuesto el "discurso social"), que de alguna forma aporta gran sordidez, aunque también creo que por ello le falta tensión y hay demasiados diálogos en fiestas, bares o lentos paseos por la calle, que sólo mantienen el interés EMHO por la tremenda eficacia de Kurt Raab (también guionista) interpretando a Haarmann. Lo más desagradable, a mitad de metraje, el asesino desnuda (si, genitales masculinos a la vista no faltan) excitado a una víctima, a la que muerde en el cuello con herida cual vampiro, luego lo arrastra por el pasillo. Uf. Y hablando de vampirismo, en la escena (casi) final, adopta una expresión que recuerda intencionadamente a "Nosferatu" de Murnau. Lo peor, cuando tira unos cuerpos envueltos al río, tal como los levanta parece que dentro sólo hay plástico de burbujas. Interesante, aunque algo tediosa a ratos.
DEATH BED, LA CAMA QUE COME (1977) de George Barry
Uf. Veamos. En una casa de campo, un demonio que vive en un árbol se enamora de una chica, hace el amor con ella y el "sexo infernal" la mata, él entonces llora lágrimas de sangre sobre la cama (que cobra vida... y hambre) antes de volver al árbol. La cama se come casi todo, salvo personas enfermas, lo cual es un chico artista moribundo, que al morir traspasa su espíritu a una de sus pinturas. Vamos, que tenemos una pintura y una cama como el Bueno y Malo de la pelicula
. He visto mucha basura de terror 70 y 80s, incluyendo algunas especialmente absurdas o delirantes ("The Redeemer", "Horror House on Highway 5", "Mystics in Bali", "Attack of the beast creatures", "Bigfoot sangriento" y largo etc) y de objetos mortales (coches, motos, neumáticos, tomates, lavadoras o cepillos de dientes asesinos) y esta cama que come es de lo más ridículo, aunque también me ha hecho más gracia que la mayoría de las otras. En realidad no sé si va en serio (clima pretendidamente atmosférico y arty -low budget style- y mucho discurso "poético") , en broma (la narración va por capitulos: "desayuno", "comida", "cena"; la cama ronca RONCA, sueña -con ser cama de hotel lujoso en la ciudad-, o se excita -oímos sus gemidos y vemos burbujas de lujuria ante una chica desnudandose) o es ambas cosas. Los disparates y momentos surrealistas mantienen el interes, con los trucajes más o menos ingeniosos, cuando traga una persona (u otra cosa: una manzana, una botella de alcohol juas) la vemos hundirse en un líquido amarillo, entonces oímos mordiscos
sangre en el liquido y aparece una calavera. Highlight, por decir uno: cuando va cortando la garganta de una chica con la propia cadena al cuello de ella, con el background sonoro de gemidos o sonidos raros (de la cama o ya no sé de quién
).