El asesinato de la hermana George (1968): Negrísimo drama, firmado con nervio por Robert Aldrich, en el fondo no está lejos de las irrespirables relaciones que mantenían Bette Davis y Joan Crawford en "¿Qué fue de Baby Jane?" solo que aquí en lugar de hermanas son pareja, introduciendo el tema del lesbianismo, cosa que debió resultar rompedora en aquel lejano 1968.
Beryl Reid es June, una veterana actriz de televisión que lleva décadas interpretando al mismo personaje (la hermana George del título) en una de esas
soap operas británicas inacabables, su personaje es una monja que vive en el típico villorrio inglés. El declive artístico de June, y el "asesinato" de su personaje por parte de la cadena de televisión, va parejo a una crisis vital terrible, su alcoholismo es cada vez más evidente, y lo que en principio se pudo tomar por un carácter excéntrico y de "diva" va conduciendo más y más a una personalidad que simplemente, disfruta haciendo daño, provocando situaciones que ofendan, hieran y molesten a los demás.
En una espiral de auto-destrucción terrible, June no tiene piedad, ni con sus eternos compañeros de rodaje, ni con su novia Alice (Susannah York) ni con cualquiera que se cruce en su camino cuando está bebida o enfadada, como las dos monjas en un taxi a las que molesta sexualmente, porque sí.
Beryl Reid ganó el Globo de oro a la mejor actriz, cosa que francamente, no me sorprende en absoluto, pues su "hermana George" es una de las interpretaciones femeninas más poderosas que jamás he visto. Hay escenas inolvidables, como aquella en que June obliga a Alice a arrodillarse y masticar un puro, como castigo por supuestas infidelidades, que probablemente, solo estén en su cabeza, o la maravillosa escena en que, armada con papel y lápiz, usando nombres distintos, June bombardea a la cadena de televisión con cartas de supuestos admiradores de la hermana George, preocupados por su "muerte". Hoy supongo que usaría un proxy para bombardear el mail de la BBC
Grandísimo Aldrich. La película no llegó a estrenarse en cines en España, para sorpresa de nadie, supongo que en 1968 no sería bien recibida por los censores por su tema central y su carga de sexo explícito homosexual. La película se dobló para su pase por TVE en 1985, y aunque el doblaje lo he estado escuchando 10 minutos por curiosidad de ver qué voces había, y es bastante bueno, este es un caso concreto que pide VO a gritos.