Si alguien piensa que De Palma se ha tomado en serio a si mismo en algún momento, yo recomendaría revisar "En nombre de Caín". Un auténtico festival de risotadas donde SE NOTA que están haciendo una comedia involuntaria... voluntaria. No hay más que ver a los actores, o la mismísima historia, una vuelta de tuerca al sobadísimo tema de la identidad múltiple, que TAMPOCO se toma en serio a si mismo, ni lo intenta, lo abarca todo con tópicos de baratillo, y la película está montada como lo haría un esquizofrénico, desde distintos puntos de vista, abarcando alucinaciones, todo un complot por parte de De Palma y los actores, para que el espectador piense a conciencia que se encuenta ante uno de los mayores bodrios de los noventa, cuando se trata de una comedia experimental absurda con la que, una vez superadas las espectativas de ver una película normal, se pueden pasar dos horas y pico de risotadas ante unos fallos de montaje y unos tópicos de guón que se nota TAAAANTO que son a propósito, que si al final alguien cree que es una mierda, es porque en ningún momento se ha dejado meter en ese carrusel genial de delirio sobreactuado. Maravilosa.