Por fin ayer Chicote se pegó el repaso a unos cuantos viejos conocidos.
Mas o menos lo esperado:
- el de la Tana sigue siendo un macarra, pero como Chicote le decoró el bar a su gusto , se siente como en casa. La cocinera se largó, normal, a su carácter se une que tampoco creo que para dar hamburguesas haga falta mucho personal y muy diestro... La pareja sigue dandole largas y se ha teñido el pelo ( parece aun mas vieja )
- el de la zapatería sigue siendo un idiota maleducado e inmaduro. A ver lo que dura con el nuevo socio... Ah, y ahora sirven patitas de calamares fritas, el summun de la sofisticación vaya. La paella, como siempre tenía una pinta horrible.
- las del club de tenis bastante bien, la choni sigue estando potente a reventar
Yo creo que ahi el problema nunca fue la comida, sino lo cutre del lugar y las circunstancias personales de las hermanas. Una vez que le dieron un baño de pintura y la otra parió, todo parecía ir ya encarrilado.
- Nuestro viejo amigo de Boecillo ( y ex- de Chicote, por lo que se vio ) en su línea: sigue encocado y haciendo lo que le sale de los cojones. De hecho le dejó bien claro que él en ningun momento quería reflotar la bodega, que él quería retirarse y vivir sin pegar un palo al agua, invitando a sus amigotes y poco menos que dejar la cosa como lugar de peregrinación curiosa , tipo museo. La cara de Alberto al escucharlo daba cosica...
- El mexicano de Barcelona parece que es al que mejor le va; se ha librado de uno de los socios y la locaza sigue igual de borracha que siempre ( y sin arreglarse la dentadura ) y tambien ha dejado el accionariado, por lo que se la puede echar a patadas si se pone muy pesada.
En próximas ediciones espero que Chicote se pase tambien por los locales cerrados, y puede que por alguna que otra prisión para visitar a sus dueños...