Yo por mi trabajo tengo esa "maldición", pero he aprendido a desactivarla (o al menos intentarlo) cada vez más. Sencillamente llega un punto en el que si nos obsesionamos con "lo técnico", lo verdaderamente importante que es la historia y entretenernos (más que desquiciarnos por "ese pixel de ahí"), no disfrutamos.Me encantaría poder tener la rapidez mental como para hacer cálculos instantáneos de comparativas de lo que veo, cómo lo veo y como lo recuerdo en otros proyectores mientra lo veo. Me causa más asombro que el Madrid. Si estoy entretenido analizando los negros, la nitidez, el brillo, el enfoque de los bordes, el contraste, qué tiempo me queda para entretenerme con lo que veo? O lo de repetir las películas para ir analizando diferencias. Me es imposible ver todo lo que quiero como para repetir a destajo y en plan analítico.
Os envidio la perseverancia. Y los dineros. Lo demás, nada de nada. Es muy esquizofrénico.
Si me pongo en plan analítico pues claro. Pero eso solo sucede cuando no quiero disfrutar de lo que veo, simplemente comprobar. Aunque reconozco que a veces mi cabeza da vueltas y me "chiva" cosas, me gustaría tener la voluntad propia de hacerme un "severance" para eliminar de un sopetón determinadas soplapolleces.
Cada vez leo menos aspectos técnicos de lo que sea, mucha gente está entrando en una espiral desquiciante en la que importa más "ese pixel" que la historia que veas o el juego que juegues. Sencillamente no merece la pena.
Alguno creo que hasta es capaz de "medir" los nits del sol y buscar banding en el firmamento, cuando sale de casa. Así todo.