Pues sí, sin duda que Verhoeven tuvo que luchar lo indecible... Pero que la permisividad de los estudios a introducir ideas frescas, originales, valientes y políticamente incorrectas se ha ido cerrando con los años hasta ser más difícil que antaño, creo que también es un hecho.
Cierto. Pero esa libertad no ha desaparecido. Solo ha mutado y emigrado.
El atrevimiento y la libertad artística, llamémosle "independencia", relativa, con todas las comillas que hagan falta, de la que carece el cine americano de hoy en día, la pudo ofrecer Hollywood en los 70 para captar los espectadores que le había quitado la televisión en los 50 y 60.
Se perdió a lo largo de los 80, con la apoteosis del cine comercial (de cuyos estertores se aprovechó Verhoeven), y emigró a otras empresas en los arrabales de los estudios hollywoodienses, durante los 90: lo que se denominó el "cine independiente" (más comillas).
Hollywood fagocitó ese cine y la independencia de ideas se fue a la televisión por cable, también en los arrabales de Hollywood, a partir del 2000.
Cuando la televisión por cable se volvió codiciosa (HBO), otros canales de televisión lanzaron el órdago.
Y luego se impuso Internet que lo trastocó todo con un caos que acabará, primero, por ordenarse económicamente y, después, por agotamiento, creando nuevas burbujas. No te quepa la menor duda.
Comercialidad y creatividad son como el agua y el aceite, no se pueden juntar del todo pero tampoco separar. Y necesitamos los dos: una para sobrevivir y el otro para lubricar y dar gusto.