Cada vez que uso Time Machine para recuperar un sistema, pienso en que es la herramienta perfecta. Hoy he recibido mi nuevo MacBook Pro y no ha podido ser más fácil hacer una instalación limpia de macOS Mojave y restaurar la copia que había hecho del anterior antes de venderlo.
En mercado de segunda mano hay de todo, pero si separas la paja del grano, hay oportunidades excelentes como esta, muy cercana a la experiencia de estrenar un equipo, con su caja original y hasta los plásticos protectores.
El anterior propietario lo había cuidado muy bien, y tanto la pantalla como el teclado o el aluminio están impecables. Tan solo alguna mínima marca en el aluminio, prácticamente imperceptibles. Las mismas que le haría cualquiera por muy bien que lo cuide.
Se trata de un MacBook Pro Retina 13" de principios de 2015, con procesador Intel Core i7 (de dos cores, no cuatro) a 3,1GHz, 16GB de memoria RAM DDR3 a 1867 MHz, disco de 256GB y gráfica Intel Iris 6100.
Cuando busco un equipo usado, además del estado general, presto bastante atención al estado de la batería. Y en este caso he tenido mucha suerte ya que el equipo tiene la batería al 100%. En un equipo portátil la autonomía es fundamental, así que estoy de enhorabuena.
El equipo va como un tiro, notablemente más rápido que mi anterior MacBook Pro Late-2013 con procesador Core-i5 a 2.4GHz y 8GB de RAM. Lo he notado sobre todo usando mi máquina virtual de Windows 10 Pro que ejecuto con Parallels Desktop, y responde como si fuera un portátil Windows nativo.
Aunque no dicen nada de la experiencia de uso real, os dejo las puntuaciones de Geekbench. 4131 con un core y 8058 con los dos cores en funcionamiento. Con mi anterior modelo conseguía llegar 3600 y 7400, por lo que en valores absolutos he mejorado un 20%. Usándolo, mis sensaciones son de una velocidad aún mayor que ese 20%.
Cuando estoy en casa o de fin de semana, uso el MacBook Pro como equipo para mi ocio con macOS y en lugar de tener que traerme la Surface Pro 2017 Advanced LTE que uso en el trabajo, tengo una máquina virtual con Windows en la que tengo replicada mi instalación de Office 365, con Outlook 2016 como cliente de correo, las apps de Office y mi disco en la nube con OneDrive. Así tengo claramente separado ocio de trabajo.
El disco de 256GB es un Apple SM0256F con la revisión de firmware UXM2JA1Q y estando conectado a través de PCIe es bastante rápido. No obtiene los valores de los últimos MacBook, pero unos 700MB/s de velocidad de lectura y escritura son valores mucho más que decentes, mejores que los que tengo en mi PC principal con un Samsung EVO 850 de 512GB.
Los 256GB pueden parecer justos, pero bien administrados dan para mucho. Además en el lector de tarjetas microSDXC tengo montada una tarjeta Trascend JetDrive de 128GB en donde almaceno todo lo que sea multimedia pesado, música, cine, series, etc. Es una SD "recortada" para que quede al ras del chasis y no sobresalga. Es francamente cómodo y si os interesa tenéis más info en
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Este equipo siempre lo uso de forma inalámbrica, y monta una tarjeta AirPort Extreme con un Broadcom BCM43xx que conecto usando el protocolo 802.11ac al router Asus RT-AC1200G+ y la velocidad es fantástica, tanto en el acceso a los contenidos de mi equipo principal que hace de servidor como a Internet.
Tengo la conexión de Vodafone y no consigo llegar a los 600Mbps, pero me parece más que suficiente llegar a los 400 Mbps simétricos.
El trackpad que monta este modelo no es mecánico, sino que usa un mecanismo electrónico que lo emula al que han llamado Force Touch. Necesito tiempo para adaptarme y de momento he desactivado el clic fuerte y la respuesta táctil ya que no conseguía arrastrar elementos en el Finder como estaba acostumbrado. Sé que me estoy perdiendo cosas, pero iré poco a poco.
Encantado con el nuevo equipo. Es más o menos lo mismo que tenía pero mejor, más rápido pero sin cambiar el formato del portátil que tanto me gusta, con todos los puertos a mano. Los dos USB 3.0 los uso mucho, igual que la salida HDMI que de vez en cuando también se usa y solo me tengo que preocupar de tener un cable HDMI, no un dongle para conectarlo.