Vista ayer, en familia y todos con camiseta de Mario, como está mandado.
Hay por ahí mucha crítica tirando por el suelo la película, diciendo que es muy infantil y que el guión es muy simple. Esas críticas son el ejemplo perfecto del “crítico” de cine amargado asocial que escribe su “crítica” pensando en cómo llamar la atención más que el de al lado.
Pues claro que es una película infantil, claro que es simple… El que busque otra cosa en esta película es como el que va a una carrera de motos y se queja porque no hay goles. Anda a cagar.
Es una delicia para cualquiera que haya disfrutado del universo de Mario en cualquiera de sus variantes. Técnicamente es brillante, es divertida y está llena, pero llena hasta arriba, de guiños a los fieles de Nintendo. Paso los cuarenta, peino muchas más canas de las que me gustaría y os puedo decir que disfruté como un gorrino.
¿Infantil? ¿Impropio de mi edad? Me la suda. Me lo pasé genial, eso es todo lo que me importa. El resto, para los del postureo.
Como homenaje al mundo de Nintendo me parece sublime. Tiene un buen gusto y un nivel de detalle que abruma. Que Miyamoto sea productor no se queda en un simple detalle para el póster. Rezuma MAJIA (
@Christian Troy) por todas partes.
Vamos, que me ha encantado. Si no es la mejor adaptación de un videojuego jamás hecha, poco le falta. Deseando estoy de que llegue la segunda parte (que llegará, queda claro en los post-créditos).
BIBA Nintendo.