Me es muy difícil contextualizar lo que es este lupanar para que lo entendáis mejor. Arganda del Rey, municipio de 55506 habitantes (2012) a treinta kilómetros de la Puerta del Sol (más o menos). Pese a que es un municipio importante en la comarca, cabeza de partido judicial y la capital del depauperado sureste de la región, el nivel intelectual que muestran sus voces más escuchadas es sencillamente desolador. Aquí las Fiestas no son una celebración o una excusa para que los feriantes hagan dinero, es una puta religión caciquil y descarnada que hace procliva a la población a soltar frases del tipo "Yo soy de Arganda de pura cepa". Amar a tu puto pueblo sobre todas las cosas es otro de esos mantras, y dar por culo con los toros otro más. Como digo, es un pueblo importante en cierto modo, donde los de pueblos de alrededor vienen a hacer sus tareas administrativas, compras, estudiar o trabajar. Sin embargo, la actividad en este bello lugar se ve paralizada durante el mes de septiembre por la celebración de las putas fiestas. ¿Por qué? Si bien Arganda es un municipio grande, su trazado urbanístico es una cosa de locos. Está en una ladera, tiene cuestas y las principales arterias (las usadas por todos) son estrechas e incómodas. En septiembre a esta circunstancia se añade a que en que la plaza del Ayuntamiento (un punto importante de este trazado) se monta una puta mierda de plaza de toro portatil, cuadrada, en cuesta y tan segura que en caso de pasar algo es una ratonera. Pero aunque hay voces discordantes, y mucho mangurrino (el que no es de Arganda y por lo tanto alguien ajeno a todo esto) por encima de todo está la tradición y su virgen. Los toros, las virgenes... No salen nunca de su terruño, las vacaciones y el dinero ahorrado se lo gastan en las fiestas...
Después los argumentos que puedes encontrar son de la misma talla intelectual que lo que he entrelazado, pero no te metas ni muestres signos de inteligencia, porque los cabrones son capaces de darte una paliza por defender su mierda.
Se denomina a este solar como "tierra de recortadores". Son los héroes, algo de lo que sentirse orgullosos... La verdad es que después, esta ciudad que se autodenomina taurina con su puta mierda de plaza sacada de un briconsejo, puedo decir que el amor por la tauromaquía es de la peor especie, de ese que criticais, no del respeto ni nada por el propio procedimiento para cargarse al toro. Aquel que se muestra disidente, es censurado. Hubo un matador que surgió de aquí que hizo unas declaraciones que ponían en duda su compromiso para con el lugar, y le tiraron el hueso de una pata de jamón desde la grada. Eso sí, hacer animaladas con el toro en la capea es una gran afición. Un alcalde que quiso cambiar la plaza de lugar, vio la cabeza de un toro puesta en su puerta... Si el cura quiere retirar el monolito en homenaje a los caídos fascista en la Guerra Civil, le dicen que sale con los pies por delante... En fin, este es mi hogar. ¿Venís a verlo?