No sé dónde he oído que la mujer de Pizzolatto se encontró a éste tirado de madrugada entre guiones y rodeado de alcohol y pastillas... Parece ser que el tío vivió un estrés brutal escribiendo la serie y que trabajó como un loco. Creo que lo he oído en algún podcast. Y no sé si esto es un rumor o una certeza...
Bueno, el tema es que yo cada vez creo menos en la perfección total de la obra artística (entendiéndose "perfección" desde lo subjetivo, porque lo que para mí puede ser perfecto para otro no lo será y viceversa). Es decir, me puede parecer mejor una obra imperfecta pero con muchos destellos de maestría que una obra más completa, más sólida, pero sin gotas de absoluta genialidad. ¿No será que la "perfección" está algo sobrevalorada?
Pongo de ejemplo "Carnivàle", que es una serie inacabada, que terminó antes de lo previsto y que da sensación de que se abortó antes de llegar a desarrollar todo su grandísimo potencial. Pues bien, a pesar de eso para mí es más valiosa que muchas otras que han obtenido mayor repercusión o consenso. "Carnivàle", mientras estaba viva, resultaba fascinante.
Por otro lado, tengo la total seguridad de que esta "True Detective" va a ganar en un segundo visionado. Estando ya alerta, seguro que uno puede atar cabos mucho mejor y cerciorarse de detalles que pasaron inadvertidos. Incluso ver mejor cómo ha construido Pizzolatto su guion, cómo ha sido su estructura, cómo ha dosificado la información y desde qué ángulos y mediante qué símbolos... Porque, oye, igual la trama no es tan macguffin como pensamos (yo el primero).