@nevermore
No, en absoluto no coincido en los planteamientos maximalistas que exponéis. Una cosa es convenir en que las personas con dinero, por pura lógica, tengan la vida más fácil y otra que las personas humildes no puedan prosperar y llegar a los mismos niveles.
Tú dices proceder de una familia media. Pues mira, yo procedo de familias bajas y humildes. Mis abuelos agricultores y emigrantes, que se doblaron la espalda para dar de comer a mis padres. Y mis padres , empezaron su vida laboral con una mano delante y otra detrás. ¿Y sabes qué? El 70% del sueldo que entraba en casa se fue durante 20 años en que ni hermano y yo estudiasemos en un colegio privado de élite. Comíamos en casa de mis abuelos, mi abuela nos hacía mucha ropa de telas que compraba. Y de vacaciones siempre en casa de mis abuelo, menos un par de veces a Mallorca ya de mayores.
Conservo amistades de ese colegio, desde gente de procedencia humilde como yo, a otros que se codean con el palco del Bernabeu.
Yo, después de estudiar en la Universidad (y eso que suspendí la selectividad la primera vez), me saqué la carrera y empecé a trabajar más o menos de forma fija a mediados de los 90 por 60.000 pesetas al mes. Ya con la entrada del euro, a duras penas pasaba de 700 euros. Y poco a poco, formándome en el trabajo he llegado a donde estoy ahora.
Mi mujer, aun de familia más humilde. Mi suegra limpiando la mierda de la casa de familias bien y en ratos libres cuidando a una persona con alzheimer. Mi suegro, en una granja montando jaulas. Mi mujer solo llegó a la educación obligatoria porque tuvo que empezar a currar. Hizo mientras curraba varios módulos de contabilidad, y con esfuerzo, ahora está en un puesto de responsabilidad en una gran cadena hotelera española.
Así que no, eso de que las élites siempre son élites y los desfavorecidos siempre desfavorecidos, no. Una cosa es que tengan más facilidades o que el dinero que heredan les haga la vida más fácil, pero hoy en día, en Occidente, la igualdad de oportunidades existe y es real. Y no negaré que la suerte tenga un papel fundamental, pero para que te toque, has de ir jugando boletos.
Piso más con los pies en el suelo que muchos de los que se llenan la boca hablando de clases sociales y demás historias. ¿Qué hay clases sociales? Obvio. ¿Que alguien de clase baja no podrá llegar a ser un "aristócrata" fácilmente?. Obvio. Pero con esfuerzo se puede llegar lejos y vivir más que dignamente.
Así que ya me cansan, no lo digo por ti, esos discursos clasistas.
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