Yo he compaginado el doblaje con la VO durante más de 25 años, desde que llegó el DVD, y considero que tengo una visión más completa y abierta que todos vosotros, mamones.
Nunca he entendido el afán destructivo e irracional contra el doblaje. Es una cosa de odio, visceral, no entiendo. No se trata de discutir ya por cual de las dos cosas es mejor, sino una lamentación por no poder destruir, eliminar, el libre albedrío, la posibilidad de elegir de los que no elijen "lo correcto". Si cambiáramos la palabra "doblaje" por otras de connotaciones políticas o sexuales, quedaría un discurso fascista guapo.
Hombre, yo en parte lo entiendo. Si te gusta el arte y existe una posibilidad de zaherirlo menos es normal que estés en contra de ello, por pura razón de ver lo que amas menos comprometido, y por respeto al artista. No hay vuelta de hoja. El doblaje altera la obra de arte, el subtitulado la interpreta. La diferencia en cualidad es inmensa tan solo desde esa perspectiva. No hay color. A los que nos gusta leer, hablamos idiomas y sabemos lo que una traducción puede hacerle a un libro, mataríamos por tener mejores opciones.
Si ves el arte como puro entretenimiento para pasar el rato, es lógico que te parezca de dudoso gusto que nadie le diga a nadie como divertirse. Pero si lo contemplas como una expresión cultural que ha sido y es fundamental para el desarrollo intelectual y social de la raza humana desde su primer momento, entonces lo más lógico es defender su integridad a toda costa. Sobre todo cuando existen opciones mejores y peores.
Que sí, que si, que yo también me veo algún doblaje de vez en cuando, que he crecido con ciertas voces que me dan un tilín nostalgico, que a veces ver ciertos clásicos de los ochenta que vi del videoclub cuando era un chiquillo tienen un aura mágica con las primeras voces que escuché... Eso también lo entiendo. Al igual que entiendo que una vez que te acostumbras, hay voces que te acaban de enamorar y se identifican con ciertos personajes. Es complicado decirle adiós a Constantino Romero por pura pureza de principios. Y también pienso que a veces el rechazo al doblaje se excede. El doblaje existe, y sí, sí que hay buenos trabajos de doblaje. Extraordinarios incluso. Y sí, aunque duela, hay actores que hacen un mejor trabajo de interpretación que el original.
Y después tenemos a directores como Miyazaki, que ha dicho varias veces que prefiere que veas sus peliculas dobladas y te concentres en lo visual sin la distracción de unos subtítulos. Y no es ni el primer ni el único director de animación en decir algo semejante. Se puede argüir también que los subtítulos son una intrusión visual en un medio principalmente visual. Y que por mucho que la costumbre nos impida ver que nos distraen, nos distraen. O que la economía y síntesis del subtitulaje es una pobre substitución de la fluidez de un dialogo bien entendido y captado con igual naturalidad. De los italianos doblándose con actores diferentes en su propio idioma por razones estéticas no hablamos porque al menos se respeta la intención artística, pero es un buen comentario sobre las posibilidades del doblaje en si mismo.
¿Me gustaría que el doblaje desapareciera? En lo personal, sí. No por falta de respeto por aquellos a quienes les gusta, sino porque tengo más respeto a los artistas que crearon el arte y sigo pensando que, globalmente, es la opción más solvente. Pero no es un asunto tan simple. El doblaje existe y me conformo conque la gente, antes de decidir, tenga al menos una idea, por muy personal que sea, del valor de aquello entre lo que elige.