Uff... vais muy deprisa y no puedo comentar todo lo que se dice, pero se agradece que el hilo esté vivo y con animación.
Los altavoces son para mí una opción claramente mejor que los auriculares para disfrutar de la música, pero no todos tenemos posibilidad de utilizarlos como se debe al vivir en familia, así que los auriculares simplemente son una opción más que te permite escuchar música que de otra forma no harías.
Para mí todos los sistemas son válidos y complementarios. Mi prioridad es escuchar música, llevo haciéndolo cada día desde que tengo uso de razón y forma parte de mis necesidades básicas. Salvo en el trabajo, en donde no concibo escuchar música ya que me hace perder la concentración, escucho música en todas partes y casi de cualquier manera posible.
Me gusta escuchar música con calidad, pero no me obsesiono con el tema. Me gusta ir probando equipos nuevos, y según vas subiendo de nivel en general percibes que al ser más detallados y reveladores, al tiempo son más castigadores con una mala grabación, hasta el punto de que pueden conseguir que no puedas escuchar un álbum que te encantaba.
Escucho mucha música grabada hace muchos años y a veces no en las mejores condiciones y por eso los Sennheiser HD 650 son mis auriculares preferidos, son unos perdonavidas con las malas grabaciones y te permiten disfrutar de casi todo.
Otra tema que tengo claro es que la música en alta resolución es casi al 100% un engaño en toda regla. Los famosos 24bit y 192KHz no me enseñan más, sólo ocupan más espacio de almacenamiento, pero de todo lo que he escuchado - y mira que lo intento - no he conseguido notar diferencia con respecto al CD con sus 16bit y 44.1KHz.
Y lo mismo sucede con las conversiones que realizo de los CD en formato FLAC, en formato MP3 o en formato AAC. Quizá algún ligero matiz en alguna grabación, pero nada que se pueda poner a prueba en una prueba ciega.
Si os apetece poneros a prueba, en
http://www.soundliaison.com/all-categories/6-compare-formats tenéis listos para descargar 2 temas en formato PCM (WAV) a 24/96, PCM (WAV) a 16/44.1, convertidos a FLAC y a MP3. Probadlos y me decis, a mí me suenan los 4 iguales.
Los de Sound Liaison dicen que no desesperes, que puede que no notes nada, pero que requiere su tiempo, que esto es como degustar el buen vino, que requiere de tiempo para aprender... ¡anda ya! No olvidemos que ellos venden música en alta resolución, así que neutrales, neutrales, no lo son.
Si conseguís distinguirlos, enhorabuena. Y a partir de ahí pensad en si eso que habéis notado merece la pena como para tener que comprar o descargar de nuevo todo lo que tenéis.
Neil Young y su Pono es lo mismo que Jay-Z y su Tidal. Todos quieren hacer dinero con el negocio de la música y para hacer dinero necesitas muchos consumidores que paguen poco, o pocos que paguen mucho. Los que quieren vender música en alta resolución se orientan claramente hacia el segundo grupo, más reducido, con capacidad de gastar y generalmente influenciable por la publicidad y las imágenes de marca.
El negocio del CD sigue existiendo, igual que existe el del vinilo, pero es minoritario absolutamente y las nuevas generaciones consumen de otra forma la música, ya sea en emepetrés, en estrimin o como sea, quieren las canciones de sus ídolos, como ha pasado siempre, ídolos creados por los medios y alimentados por el fenómeno fan.
Y ahí está un debate paralelo que me parece más interesante que el de los formatos, el hecho de que hoy se consumen canciones sueltas y no álbumes completos. Se pierde el concepto del álbum como una obra que tiene un sentido lineal de principio a fin. Yo lo entiendo de esa forma y así me acerco a las escuchas, a las que procuro darles el espacio que requieren.
Spotify me parece una maravilla para descubrir música, iTunes Match una maravilla para almacenar en la nube una versión reducida de tu discografía favorita, los archivos FLAC magníficos para archivar los CDs y escucharlos con excelente calidad. Y todo se puede usar con altavoces o con auriculares, como puedas o quieras en cada momento.
Esta tarde le he dado un nuevo pase en familia a la película The Good Lie (La Buena Mentira) y tras terminar he consultado en Spotify la banda sonora ya que había escuchado una canción africana muy atractiva que ha resultado ser Obiero, de Ayub Ogada.
Y en dos clics estaba escuchando el álbum de Ayub Ogada, En Mana Kuoyo.
¿Alguien puede decir que eso no es una herramienta poderosa?