Y yo te digo que trabajo en esto y que la información real que tengo es muy diferente de mi experiencia de los ultimos 20 años, que coincide con la visión de las mujeres.
¿Nos puedes ofrecer datos empíricos que podamos revisar nosotros mismos? Tu experiencia personal y la "visión de las mujeres" son experiencias subjetivas, no hechos contrastados. La inmensa mayoría de la población piensa que el mundo es más violento y peligroso que nunca cuando lo cierto es que no ha habido un momento más pacífico y seguro en la historia como el actual. La inmensa mayoría de la población tiene mucho más miedo a morir en un accidente de avión o en un ataque terrorista que a morir de cáncer o de un infarto, cuando es mucho más probable que la causa de su muerte sea una de las últimas. La inmensa mayoría de los conductores consideran que conducen mejor que la media, cuando en realidad solo la mitad puede conducir mejor que la media. Las mayoría de las mujeres tienen mucho más miedo a ser violadas que a matarse por resbalarse en la ducha, cuando la segunda circunstancia es mucho más probable estadísticamente. La mayoría de la gente tiene miedo a comer "comida con químicos" cuando los conservantes son una de las cosas que más vidas ha salvado, junto a las vacunas, los antibióticos y la cloración del agua. En líneas generales, los seres humanos somos penosos a la hora de interpretar la realidad de manera objetiva, porque nuestro sistema cognitivo funciona a base de sesgos. Como decía el gran Richard Feynman:
"El primer principio es que no te has de engañar a ti mismo, y tú eres la persona más fácil de engañar". Por eso es tan importante tomar datos empíricos y analizarlos intentando controlar todas las variables y evitando cualquier sesgo.
En este hilo se han publicado un montón de datos que demuestran que la "brecha salarial", tal como es definida habitualmente (que a una mujer le paguen menos que a un hombre por hacer el mismo trabajo), es una falacia. Si existen datos que demuestran que la brecha salarial es una realidad, enséñanoslos, o dinos en qué se equivocan los datos que manejamos nosotros, pero no apeles a la experiencia personal o a las creencias subjetivas de un colectivo, que carecen de valor probatorio alguno.
Cuatro chalaos. Actrices fracasadas, una twitera, una monologuista, periodistas de segunda. ¿Estas son vuestras referencias? ¿De verdad me estas difciendo esto? ¿En serio? Entiendo que es una broma. No conozco ni a la mitad ni me importa lo que digan. "Estar informado" no significa leer mierda ni a barbijaputa, esta es la clave de la desinformación.
Actrices fracasadas que escriben libros que están entre los más leídos en España. Una monologuista que va difundiendo su ideario por los colegios de toda España. Periodistas "de segunda" que venden más libros que novelistas consagrados y que tienen más seguidores que algunos actores/cantantes. Cuatro chalados que ocupan importantes puestos de responsabilidad en universidades, equipos directivos de periódico y ocupan escaños en las Cortes Generales. Don nadies, vaya.
Que tú no conozcas a la mitad ni te importe lo que digan es irrelevante. Yo hasta hace dos días no sabía quién era Bad Bunny, y resulta que es un cantante que tiene 12,5 millones de suscriptores en Youtube y tiene 5,7 millones de seguidores mensuales en Spotify. Si buscas su nombre en Google, te salen la friolera de 371 millones de entradas. Que uno no conozca a alguien no quita el hecho de que esa persona sea conocida por mucha otra gente y que pueda llegar a ser un referente en determinados círculos. Que tú no leas a Barbijaputa no quita que tenga miles de seguidores que considera cada una de las cosas que escribe como palabra divina (a ver por qué te crees que le han dado una columna en Eldiario).
Gente como Beatriz Gimeno es la que se dedica a difundir el ideario feminista radical en el ámbito académico, dando clase, escribiendo artículos y libros. "Actrices fracasadas" como Leticia Dolera o Towanda Rebels o youtubers como Miare, Ayme Roman o Asadaf esparcen ese ideario entre el vulgo, especialmente entre la juventud. Periodistas como Ignacio Escolar se encargan de esparcir ese ideario entre los votantes de izquierdas y partidos políticos como IU o Podemos son los que quieren trasladar ese ideario a las leyes. O sea, estamos hablando de los sectores de la población (educación, medios de comunicación y clase política) que tiene más poder para influir en la gente y para cambiar el mundo. Pero nada, según tú son cuatro chalaos que pueden decir todas las burradas que quieran porque no suponen riesgo alguno.
Si sigues insistiendo en que lo que diga esta gente no tiene ninguna influencia sobre la población general te invito a que hagas una pequeña comprobación empírica: busca en Google cuántas publicaciones contenían alguno de los términos "heteropatriarcado", "brecha salarial", "cultura de la violación", "mansplaining", "manterrupting" o "manspreading" en el año 2017 y después haz lo mismo para el año 2010, igual te llevas una sorpresa.
Para terminar, quiero reutilizar un ejemplo que ya he usado más veces en el foro, pero que ilustra muy bien lo peligrosa que puede llegar a ser una ideología en manos de "cuatro chalaos". El movimiento antivacunas también empezó como un movimiento de cuatro chalados: un médico corrupto (Andrew Wakefield), una conejita playboy (Jenny McCarthy) y dos actores de Hollywood en horas bajas que hoy en día son la sombra de lo que algún día llegaron a ser (Jim Carrey y Robert De Niro). Pues bien, estos "cuatro chalaos" han provocado que en algunos barrios de California las tasas de incidencia de algunas infecciones víricas sea superior a la que tienen en Burkina Faso. Estos "cuatro chalaos" han provocado que en todo el mundo estén repuntando enfermedades que llevaban décadas controladas y que el número de niños muertos por enfermedades que hace unos pocos años no mataban a casi nadie esté aumentando año tras año. Y visto lo sucedido en Italia, donde han puesto a una ministra de Sanidad antivacunas, no parece que la tendencia vaya en retroceso. Y creo que no hace falta que te explique las catastróficas consecuencias que puede tener que esta tendencia siga en aumento.
Sí, las feministas radicales, cuantitativamente hablando, son cuatro locas. Pero son cuatro locas que actualmente ocupan posiciones de poder, con potestad para legislar y para crear corrientes de opinión. Cuantitativamente son minoría, pero cada año su mensaje va extendiéndose cada vez más, tanto entre las élites como entre el vulgo, y si no le ponemos freno corremos el riesgo de que nos acabe estallando en la cara, como el movimiento antivacunas.