Respuesta: El cine nos ofrece un bastión artístico ineludible: Inglourious Basterds
¿Porque está mejor utilizada la estructura no lineal en "Reservoir Dogs" que en "Kill Bill" o "Malditos Bastardos"? Pregunto, no va con segundas. Me interesa que desarrolles eso.
Pues por la misma razón que la primera película de Indiana Jones es un ejemplo de lo que debe ser un film de aventuras y la última una estupidez impropia de alguien como Spielberg.
Hay una cosa que parece difícil de aceptar, pero que no tiene vuelta de hoja: no existe ninguna fórmula mágica para que una película sea redonda. El mismo director, con los mismos actores, con el mismo equipo técnico y con un guión similar pueden hacer una joya y un bodrio con doce meses de diferencia sin despeinarse, y no tener ni puñetera idea de por qué una vez fue bien y otra mal.
En
Reservoir Dogs todos los cambios de tiempo me llevan a alguna parte, me dan una información que me ayuda a ir descubriendo las motivaciones de cada personaje y me aclaran el hilo argumental. Y eso se debe a que el guión, además de ser formidable, está trabajado para que sea así. En
Inglorious, por el contrario, me aportan muy poco,son reiterativos, y me están interrumpiendo una trama que se podía aclarar con dos frases.
Lerink dijo:
Para mi Death Proof no es un homenaje al cine trash: es una reivindicación de la artesanía en el cine a través de la yuxtaposición de los dos mundos que siempre enfrenta Tarantino: el de la ficción que imita/copia/plagia referentes y no puede huir del pasado, y el de la transgresión o ensayo fílmico a través de un storytelling agresivo pero diáfano. Es quizás la película más honesta de Tarantino en ese aspecto, ya que no necesita disfrazar esa idea de que cada película suya son en realidad dos películas opuestas, y entiendo perfectamente que un Tarantino desprovisto de artificios no guste... porque lo que la mayoría de la gente le pide a Tarantino es artificio.
Yo, directamente, no la soporto. No soporto a las imbéciles integrales de la primera parte, a las escenas de gran hermano en el bar con uno de los bailes eróticos más lamentables que se hayan rodado jamás, a las dos gilipollas de la segunda, y lo único que para mí se salva es la actuación de Russell que da la sensación de estar pensando, ¿qué coño hago yo aquí con todas estas cretinas?
Pero, claro, ¡es Tarantino!
