Mi crítica de pasadizo:
EL INTERCAMBIO (CHANGELING)
Los Ángeles, años veinte del pasado siglo. Una mujer tiene un empleo desahogado en telefónica, al tiempo que cuida a su hijo de ocho años. Un día, al regresar del trabajo el niño no está en casa. Ese será el inicio de un calvario de lucha contra un sistema policial corrupto.
Ficha Técnica
Dirección: Clint Eastwood / Productores: Clint Eastwood, Brian Grazer, Ron Howard, Robert Lorenz para Imagine Entertainment, Malpaso Productions, Relativity Media / Guión: J. Michael Straczynski / Fotografía: Tom Stern / Música: Clint Eastwood / Montaje: Joel Cox, Gary Roach / Diseño de producción: James J. Murakami / Intérpretes: Angelina Jolie (Christine Collins), John Malkovich (reverendo Gustav Briegleb), Jeffrey Donovan (capitán J.J. Jones), Jason Butler Harner (Gordon Northcott), Amy Ryan (Carol Dexter), Colm Feore (James Davis), Michael Kelly (Lester Ybarra), Geoff Pierson (S.S. Hahn), Denis O’Hare (Dr. Jonathan Steel), Eddie Alderson (Sanford Clark), Gattlin Griffith (Walter Collins)... / Nacionalidad y año: Estados Unidos 2008 / Duración y datos técnicos: 141 min. color 2.35:1.
Comentario
A lo largo de los años, el cine se ha ido conformando por medio de un lenguaje que en épocas recientes se ha ido retroalimentando con nuevos dispositivos procedentes de otras artes similares mas no iguales, como son la televisión, el video-clip, los juegos de ordenador... Los narradores que se centran en fórmulas clásicas (que no antiguas) son cada vez menos, y uno de ellos es Clint Eastwood. Es uno de los narradores actuales más frescos, directos, que prescinden de toda retórica superflua. El intercambio es un ejemplo más de este tipo de narración, una precisa pieza de relojería donde no sobra ni falta nada. Ello también es debido a un elemento que a la mayor parte de la crítica ha pasado desapercibido, como es un excelente guión precisamente graduado. Un guión que, con todo, era una peligrosísima trampa: si el director hubiese sido, como estaba previsto en un inicio, Ron Howard (uno de los productores del resultante), aún sin variar nada del libreto el film podría haber devenido en una película vacía, de postal, una lujosa recreación de época sin contenido, respaldada por medio de las apariencias y las interpretaciones.
Nada de eso hay en la película de Eastwood. Es curioso contrastarla con una película previa en su filmografía como es Million Dollar Baby (Million Dollar Baby, 2004), y aún siendo tan diferentes, cómo coinciden en ellas texturas, acentos, sentimientos y tempo. Es la huella de un cineasta puro, un director con una impronta personal, un realizador pleno de estilo e ideas.
Straczynski, por su parte, por medio de una investigación que le ha llevado años, ha reproducido un hecho real procedente de la crónica negra de los Estados Unidos, y lo ha dotado de vida y personajes, hilvanando los sucesos para otorgarles una dimensión intemporal. Lo que aquí se presencia no es “algo que sucedió en tiempos”, sino que permanece vivo y actual por medio de una realidad perenne, y que es preciso denunciar una y otra vez. Ciertas situaciones al inicio de la película tienen un reflejo más adelante, con un planteamiento similar, pero demostrando cómo han variado determinadas circunstancias: las cosas pueden ser alteradas por el enfoque. Y esa es la base sobre la cual se sustenta el film: el cambio del punto de vista por medio de la manipulación humana. Nosotros, como espectadores, sólo podemos fiarnos de los sentimientos de una madre que va en busca de su hijo, y que tiene al sistema en su contra. Así, la historia adquiere unos tonos pesadillescos y kafkianos, perfectamente recreados por medio del guión y la puesta en escena, llegando a límites desgarradores, como los flash-backs que narran las actividades del psycho-killer, o toda la parte de la ejecución.
La película, asimismo, dispone de diversos “finales falsos” que, sin embargo, hacen que la historia se desarrolle más y más. No es una torpeza de guión, ni una trampa, sino un modo de hacernos meter más en la maraña de sinsentidos y horror en que el personaje protagonista se ve inmerso, personaje que es la base desde la cual se va narrando todo, e incluso en aquellos momentos en que no tiene aparición seguimos fielmente fijados a él por el método narrativo.
Conviene no pasar por alto la recreación de época. En muchas películas actuales ambientadas en otro momento histórico da la impresión de encontrarse uno ante meros decorados y personas disfrazadas. Nada de eso sucede aquí, y el ambiente de realidad que se respira es apabullante. Eastwood, antes de director fue actor, y esa experiencia le sirve para sacar a todos y cada uno de los intérpretes lo mejor de sí mismos, incluso a aquellos como Angelina Jolie que, hasta el momento, no habían destacado en especial.
En suma, una gran película, y uno de los pocos filmes de la cartelera de los últimos años que pueden considerarse cine puro. Conviene no pasarla por alto.
Anécdotas
* Título en Argentina: El sustituto. Título en Chile: Intercambio. * Los sucesos criminales narrados, en la crónica negra estadounidense son conocidos como los Wineville Chicken Coop Murders, o también como los Wineville Chicken Murders. * Una frase habitual en el personaje de Angelia Jolie es “Nunca empieces una pelea, pero acábala siempre”. Esa misma frase informa el capitán Sheridan en Babylon 5 que le decía su padre. Babylon 5 es una serie de ciencia ficción creada por J. Michael Straczynski. Para el papel protagonista también se plantearon las actrices Hilary Swank y Reese Witherspoon. La Jolie fue sugerencia de Ron Howard.
Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)