Hinomura Krycek
Bayofilo
Hoygan que el que se lo ha currado con Vacaciones en el Mar es @Wontnerman
La semana pasada no hubo Micropost. Estuve liado preparando otra sección (que se estrenará en un par de semanas). Pero había otro motivo: tenía muchas ganas de ver la película de la que vamos a hablar hoy, y no quería comentar otra antes.
Y es que estamos ante esos momentos que cualquier ochentero ama: descubrir una película que hasta ahora no habíamos visto, y que resulta toda una delicia. Esta en concreto es, creo, bastante desconocida, y yo solo sé de ella porque hace muchos años, alquilando del videoclub "Acorralado" (la primera de Rambo) estaba el tráiler de esta. Dado que protagonizaban dos actores conocidos, nunca la olvidé, aunque creo que no he vuelto a ver / leer / escuchar referencias a ella. Y el caso es que, creo, está muy olvidada. Yo creo que injustamente.
Me refiero a Shakedown, de 1988, o como se tituló en España, Blue Jean Cop:
Como ya he dicho, es una gozada (y en mi caso, todo un ritual, porque ya quedan pocas) ponerte delante de la pantalla a ver una ochentada que se te ha "escapado" y que sabes, con cierto grado de certeza, que va a merecer la pena y vas a disfrutarla. En este caso, se trata de un policiaco y una buddy movie ochentera con todas las de la ley.
La película comienza con un vendedor de crack que tiene un violento encuentro con un posible comprador. Nunca llegamos a ver el tiroteo, pero sí sus consecuencias: el comprador muere... y resulta ser policía. El camello sobrevive. Parece solo un crimen más de los que han de cometerse en una gran ciudad durante la noche, en el submundo del crimen y la droga, pero es (y va a ser) mucho más.
Se nos presenta a continuación a Ronald Dalton (Peter Weller, tan solo un año después de su éxito de "Robocop") un abogado que lleva casi toda su carrera trabajando para "Ayuda legal" (una especie de abogados de oficio). Harto y hambriento, está a punto de dar el salto, y comienza su último caso en Ayuda legal con la mente en Wall Street, donde su novia le ha conseguido un puesto mucho más prestigioso (por no hablar de mejor remunerado) a merced de su padre, un ricachón de altos vuelos. Este caso será la defensa del camello del principio del film, acusado de asesinar a un policía.
Dado su desconocimiento del mundillo, Dalton acudirá a un viejo amigo, un policía con pintas de vagabundo nocturno, Richie Marks (Sam Elliott) quien le acompañará en su larga y peligrosa peripecia. Y es que, sin saberlo, Dalton, al aceptar el caso, se ha comprometido a meter las narices en un mundo del que nadie quiere ni saber ni admitir que existe: el de los policías corruptos, que se organizan como auténticas mafias paralelas para enriquecerse y, desde una posición privilegiada, destruir a la competencia. Todo está a la venta: desde destruir pruebas (por un precio, por supuesto) a redadas de drogas de cuyo incauto "desaparece" una parte, extorsión, amenazas, violencia e incluso asesinatos. Me recuerdan bastante a los integrantes de la serie "The Shield", o a los compañeros del prota de otra obra maestra ochentera como es "El príncipe de la ciudad", con Treat Williams de protagonista.
(Casi) ninguna peli de estas características está completa sin su historia de amor. Aquí seremos testigos del reencuentro de Dalton con una ex, Susan, que para más inri, será su contrincante en la defensa del asesino del policía, ya que, aunque era abogada de oficio, como él, ahora es ayudante del fiscal. La dicotomía entre las parejas de Dalton, en realidad nunca se presenta demasiado difícil, desde su primera escena junto a su novia de alta sociedad, en la que Dalton canta "Purple Haze" de Hendrix mientras la escucha por la radio durante el desayuno, y ella le increpa de forma ligera que cómo puede gustarle, "eso del heavy metal" percibimos claramente su disgusto y decepción, pues la incomprensión mutua flota permanentemente sobre esa relación, que más parece conveniencia social que otra cosa.
Como toda buena buddy movie, tenemos un contraste fuerte (aunque menos pronunciado que en otros títulos) entre sus dos componentes: Dalton es un tipo culto, de buen nivel económico, civilizado, sabe moverse entre las altas esferas, aunque como "parte limpia" del bromance, tarda menos de lo habitual en este tipo de películas a adaptarse a su nueva situación, defenderse de forma violenta, uso de armas de fuego... el otro miembro es Richie, un policía en horas bajas, que vive en los lavabos de un cine, hastiado y habituado a la violencia, y a quien antes confundirías con un delincuente que con un policía.
También, como en toda película de este subgénero, tenemos un momento para la confraternización, para ayudarnos a creer que dos tipos tan opuestos puedan llegar a jugarse el pellejo el uno por el otro hasta un punto de no retorno (en este caso, dicho momento se producirá en el lugar ideal para confidencias de todo filme americano: el bar) donde ambos se contarán sus batallitas respectivas mientras trasiegan unos whiskies.
¿Puntos flojos? Creo que los "malos" no están trabajados, apenas hay esfuerzo en darles un fondo o un carisma. Son traficantes de droga y polis corruptos intercambiables por cualquier otro grupo similar salido de Corrupción en Miami, son adecuadamente desagradables y peligrosos, pero poco más.
En las películas ochenteras sus malos carismáticos son muchas veces una auténtica baza, pero no es este el caso. Y eso no obsta a la genial idea de fondo: que aquí son los policías los "malos" ni que dicha idea nos de alguna escena gloriosa, como aquella que, tras aceptar Dalton el caso del camello acusado de matar a un policía, mientras el abogado pasea tranquilamente por una plaza de noche, es repentinamente rodeado por un círculo de policías anónimos, que le van cercando conforme golpean sus manos con sus porras (policiales, porras policiales) para a continuación, desaparecer tan rápida y discretamente como aparecieron. Sublime. Nadie habla, no hay violencia ni amenaza verbal, pero de forma muy explícita le han dejado claro a Dalton que se está metiendo en un berenjenal curioso y que cualquier policía puede ser un enemigo.
No obstante, yo no creo que la falta de villanos carismáticos sea un punto crítico: en cierta forma no son necesarios, la película es por y para sus dos protagonistas, y ellos solitos ya derrochan suficiente carisma por el resto (una pareja de actores con química no siempre es fácil de conseguir, y realmente es una pena que no repitiesen).
Dirige, con guión propio y escrito en solitario, James Glickenhaus, director habitual de cine de acción de serie B, cuyo título más reseñable es "El exterminador" que fundó toda una saga, aunque bastante discreta (Dalton y Richie pasan justamente frente a un cine donde se está proyectando, entre otras, "El exterminador").
Aparte de Sam Elliott (a quien siempre recuerdo como el maestro de Patrick Swayze en esa obra a mayor gloria y culto de la testosterona que es "De profesión duro") y el ya citado Weller que tampoco necesitará mucha presentación y menos aquí, tenemos a unos cuantos secundarios curiosos. El cliente de Dalton es Richard Brooks, actor que actuó como secundario en varios títulos ochenteros (Teen Wolf, Hidden, Shocker...) y que sigue en activo, sobre todo en televisión. Tenemos a Tom Waites, actor en algunos títulos de sobra conocidos, como la cosa de Carpenter, The Warriors, o Justicia para todos (la protagonizada por Pacino). Y ya en los 90, Asalto al tren del dinero.
Tenemos a John McGinley, otro sospechoso habitual (su nombre quizá no diga nada, pero ha salido en Wall Street, Platoon, Seven, Le llamaban Bodhi...). Blanche Baker era, sobre todo, la INSOPORTABLE hermana de Molly Ringwald, que se iba a casar en "Dieciseis velas" y cuya boda ponía patas arriba a la familia... pero eso es otra historia.
Recomendabilísima, en cualquier caso el tráiler hará mejor que yo el trabajo de venderosla, y amerita el, en poco más de minuto y medio, poner las cartas sobre la mesa (Jimi Hendrix, Sam Elliot en plan badass, negros con radiocasette gigante, billetes amontonados, farlopa, un coche persiguiendo un avión, tiroteos..). Con él os dejo:
La película está inédita en nuestro país en Blu Ray. En DVD, debo reconocer que ignoro si llegó a salir, pero por lo que he investigado, ni eso. En VHS la editó, primero, Lighting Vídeo, y posteriormente en los 90 fue reeditada por Tri Pictures. Se puede conseguir oficiosamente
Se supone que son cosas raritas y descatalogadas.DVD a 20€? Joer
Tienen web creo.¿Se sabe donde los van a poner a la venta?
El tiempo corre. Los DVD son los nuevos VHS. Compré mi primer DVD hace ya casi un cuarto de siglo, aunque parezca que no.
Mis primeros DVDs comprados fueron "Batman" y "Batman & Robin" (perdóname, señor) cuando los vi expuestos en 1997 en unos estantes del Corte Inglés, sin tener reproductor y sin saber siquiera qué eran esos discos plateados que venían del futuroEl tiempo corre. Los DVD son los nuevos VHS. Compré mi primer DVD hace ya casi un cuarto de siglo, aunque parezca que no.
Yo los pillaba de importación R1 USA en el fnac… Blade y Matrix creo que fueron los primeros.
En mi caso la primera de importación fue “Aliens” zona 1 comprada en la Fnac, tras el correspondiente mod que hicieron los de MundoLaser a mi primer reproductor Sony, en glorioso color champán.Yo los pillaba de importación R1 USA en el fnac… Blade y Matrix creo que fueron los primeros.
Estos eran los canadienses? Aquellos a los que les hackearon y robaron la base de datos con las VISAS de todo el mundo?Y en DVDSoon...
Que pillé Silent runnning de viernes y el lunes la tenía en casa
Mis primeros DVDs comprados fueron "Batman" y "Batman & Robin" (perdóname, señor) cuando los vi expuestos en 1997 en unos estantes del Corte Inglés, sin tener reproductor y sin saber siquiera qué eran esos discos plateados que venían del futuro
Yo los pillaba de importación R1 USA en el fnac… Blade y Matrix creo que fueron los primeros.