Realmente es una enciclopedia viviente, este hombre se merece un monumento, ademas los describe todo con una pasion tan desbordante, queda nombrado maximo catedratico de los 80.
Bueno caballeros, gracias por los ánimos y demás, pero no empecemos a chuparnos las pollas todavía Queda muuuuuucho trabajo por delante.
Llevamos 73 páginas en seis años, y apenas hemos arañado la superficie ochentera. Es verdad que el terror / ciencia ficción lo hemos exprimido, y que del tema videoclubs, por mi parte, queda cada día menos que contar, pero ahí queda el cine de acción, apenas empezado; la Cannon avanzará día a día, pero no solo de Cannon vive el hombre; iremos explorando a los héroes (y no tan héroes) del cine de acción de los 80; ni hemos empezado con el cine adolescente donde solo se han tocado de lejos algunos títulos; ahí quedan por revisar la saga Porky's, Novatos, títulos míticos (campamentos de verano, pandillas juveniles conflictivas...). Es ya un mundo en sí mismo que me llevaría años desgranar. ¿Y las comedias? ¿Y las películas de aventuras?
E incluso aunque en vida acabemos de hablar de todo eso, y lleguemos a las 200 págfinas, solo habríamos contado una parte. No solo de USA vive el mundo; ahí está el cine italiano, sobre todo el de terror, que tuvo una importancia capital en los años 80; desde Dario Argento (con decir que su "Inferno" es una de mis cinco películas de terror preferidas, creo que lo digo todo) Bava junior (los Demons, y varios slasher/giallo subiditos de tono) Michele Soavi y su hipnótica "Aquarius", o el especial Lucio Fulci que hace tiempo espero perpetrar.
Y hasta si ESO algún día lo terminamos, ¿que me decís del cine oriental? ¿De las caspas ninjas? Ni en una vida entera terminaríamos de rastrear, conseguir, ver y comentar todo eso; es otro mundo entero. Nos podemos tirar aquí otros veinte años perfectamente y sin repetir tema.
Vamos, que, como decía el gran William Forshythe en la no menos grande "Los renegados del Diablo", no dudo de que su conocimiento de chorradas será ilimitado
Si me permitís un inciso de volver en cierta manera al tema anterior, quería comentar que en los últimos meses he visto las Dudikoffadas que no vi en su día y, siendo casi todas muy malas, alguna es burdamente divertida (especialmente esa de los Super-Ninjas –pronúnciese J- en la isla es la bomba), pero la sorpresa es “La Fuerza de la Venganza” (¿Invasión USA 2? WTF!), que realmente sí que mola un huevo, parte del otro y en serio.
Ayer me calcé una sesión doble épica de Lundgren en BD.
Masters del Universo + Punisher.
De los Másteres he flipado con el nivel de producción para ser una peli de la Cannon... esa musica de Bill Conti en los créditos a lo Superman... esos FX del Edlund sableando todo lo posible al Retorno del Jedi... Esa barcaza de Skeletor bien podría ser la de Jabba reacondicionada... En fin es una peli algo fallida pero entrañablemente ochentosa.
De Punisher el Vengador (tambien castiga pero menos), no recordaba la parte del secuestro de los niños y lo del autobús. No es una mala peli de acción y me mola la frase final que le suelta al chaval... Portate bien que de mayor iré a por ti si eres malote, algo similar a Kill Bill y la hija de Vernita Green.
La fuerza de la venganza es de lo mejorcito de Duddikoff; la vi hace semanas para añadirla al especial de la Cannon. Las del guerrero americano son todas malas, pero divertidas, mi favorita es la segunda parte, con los ninja-cyborg, que te dicen que son cyborg y tienes que creértelo, pues nunca ves que lo sean
Masters del Universo fue casi un canto de cisne de la Cannon, que quiso, en sus últimos días, apostar por proyectos con mayor presupuesto; es increíblemente encantadora, chorrea ochenterismo por todos sus poros: Lundgren y sus músculos aceitosos, James Tolkan, el enano gracioso, una gran música, y NEONES. MUCHOS NEONES, NEONES POR TODAS PARTEEEESH
Vengador... la estuve viendo ayer, Hinomura. Debes ser brujo Me gusta mucho por toda la sordidez y oscuridad espiritual que transpira (apenas hay "buenos" solo malos y menos malos) acción a tope sin parar, y una moralidad gris total. La escena esa que mencionas entre Pusnisher y el chaval, hoy en día en el cine políticamente correcto es IMPOSIBLE de ver.
Por cierto que la dirigió Mark Goldblatt, montador de casi todos los títulos de acción reseñables de los años 80, que solo dirigió dos pelis (ambas para New World de Corman) esta, y la comedia de zombies "Estamos muertos, o que" que yo, y casi solo yo, adoro
Me alegra un fan de "Inferno", es lo más infravalorado de Argento. Con ciertos bajones si, pero los muchos altos son tan ALTOS que anulan cualquier pega.
Inferno es uno de los films más fascinantes que he visto nunca... en general soy fan de Argento, aunque lleve años sin tocar las teclas correctas, pero para mi, Inferno es casi la mejor: mucha gente la acusó de ser muy loca, de tener una línea argumental flojísima y dispersa en comparación con Suspiria, de estar llena de Deus ex machinas... para mi, todos esos "fallos" son totalmente buscados (al fin y al cabo, las tres Madres pueden alterar la realidad a su antojo) pero además, me parece su mayor acierto, ese aire surrealista y onírico que tiene: es, además, una película llena de dobles significados y dobles lecturas; muchas cosas que intuir, muchos diálogos que conectar...
Argento se empapó a fondo de temas ocultistas para escribirla: alquimia, psicología, paganismo, antropología, sectas urbanas modernas... de toda la película, me quedo con el diálogo / enfrentamiento final entre el protagonista y la Mater Tenebrarum: lo he visto / escuchado docenas de veces, y siempre saco algo nuevo. Aunque tiene algunos momentos de WTF, se conserva muy bien.
Auténtico Síndrome de Stendhal (nunca mejor dicho ) producen esas pocas imágenes. Y ver la película no digamos. A muchos les parece muy raro cuando lo digo, pero ... me gusta más que "Suspiria".
En lo de cine oriental espero mención de "Riki-Oh", esa peli es DIOS
La aleta vuelve a surgir en la playa, el campamento Estrella Polar reabre sus puertas, el curso de verano vuelve a reunirse en el instituto, la familia se va de vacaciones, los novatos se van a Florida... ¡Chanquete ha muerto!
Y como cada año, me gustaría ofreceros cinco alternativas de película veraniega. Cinco películas ganadoras, el top five de este año, todas ellas aconsejables en cada uno de sus campos. ¡Cada año se va haciendo un poco más difícil! Pero por fortuna aún quedan muchos campamentos que visitar, muchos monstruos marinos que destruir, y muchas rarezas que explotar. Esto es solo el principio. Y sin más, las cinco ganadoras de 2015
1. Para los papás, las mamás, o los que viajan con la familia en general: MALDITAS VACACIONES (1985)
Aquí tenemos, ni más ni menos que al GRANDÍSIMO John Candy en una película dirigida (¿casualidad?) por Carl Reiner.
Para quien el nombre no le suene, Reinir dirigió, dos años después de esta, la que será quizás mi película veraniega favorita: Juerga tropical, con Mark Harmon, Kirstey Alley y Courtney Thorne Smith, película más que comentada y recomendada ya en el Megapost a lo largo de los años, y que sigo recomendado a quien todavía no la haya visto, de forma encarecida, como una oda a la juventud, no tanto biológica como espiritual.
En Malditas vacaciones, Candy es Jack Chester, un controlador aéreo que últimamente no da una en su trabajo, y es que sufre un grave caso de estrés laboral. Sus superiores, al percatarse de que su cansancio puede acabar causando una catástrofe, deciden recomendarle que se tome unas vacaciones para descansar.
¿Vacaciones? ¡Sí! ¿Descanso?
Jack parte raudo con su mujer, sus hijos y su perro a una ciudad de playa, donde espera conseguir lo que la mayoría de padres de familia quieren cuando se van de vacaciones: descanso y tranquilidad, buena comida, relax, y que su familia lo pase bien. Desgraciadamente, nada de esto va a ser posible.
La primera en la frente: la familia llega a una casa paradisiaca con vistas al mar y perfectamente equipada, en una urbanización para ricos; todo perfecto y maravilloso, hasta que a las dos noches llaman a la puerta; se han equivocado de dirección al instalarse, y los verdaderos dueños de la mansión exigen su derecho a ocuparla Su casa DE VERDAD es una semi-ruina por donde pasan todos los que van a la playa, por lo que el prometido descanso no será tal.
Una vez me fui de vacaciones... ¡¡¡fue horrible!!!
Sin embargo, los verdaderos problemas llegarán cuando Jack choque con el cacique local, Al Pellett (un genial Richard Crenna), un millonario detestable, clasista, con pésimo gusto, pero con toda clase de privilegios en la ciudad, que chinchan a nuestro querido Candy; Pellet será responsable de que su familia se quede sin cenar langosta; será el principio de una enemistad irresoluble; Crenna es un clasista que detesta a los turistas que cada verano, invaden "su" ciudad, Jack odia que un tipo de tan baja catadura moral tenga semejante prestigio.
Mientras la hija adolescente de Chester va descubriendo el amor, y el resto de su familia parece estar siendo acaparada por un acomodado divorciado (el genial John Larroquette) este se queda en casa conforme su cuerpo va sufriendo diversas lesiones (se quema por quedarse dormido al sol, se jode una pierna...). Esa soledad le llevará a acercarse a su único aliado, Scully (Rip Torne) el dueño de un restaurante barato llamado El Percebe; Scully, como Jack, odia a Pellet porque este intentó comprarle sus negocios, y desque que Scully se negó a vender, el millonario le hace la vida imposible.
Toda confrontación clasista en el cine ochentero tiene que dar al perteneciente a la clase media-baja alguna oportunidad de ganar al enemigo de la clase alta; Malditas vacaciones no es una excepción: Jack decide arrebatarle a su enemigo la cosa que más ama, el motivo de su fama y prestigio en la ciudad, una copa que le declara ganador invicto de una regata que se celebra en el mar todos los veranos. Si Jack gana, se queda el resto del verano viviendo de gratis (ya que Pellet había comprado la casa donde estaban alquilador para echarlos) y si pierde, le pagará el precio del alquiler de las vacaciones, pero se irá.
Con ayuda de su familia, y de los inmigrantes ilegales del bar de Scully, convertirán su bar (un barco anclado en tierra, a lo Chanquete) en un navío decente que pueda maniobrar en el mar y ganar la dichosa regata. Tampoco falta la imprescindible escena, siempre presente, en la que todos arreglan y acondicionan el barco al son de alguna canción popular de la época, entre bromas y despistes
Malditas vacaciones es ideal para verla antes de salir para la playa, porque denuncia, sin dejar de reírse de ello, esas playas abarrotadas como sardinas, esas ciudades infestadas de turistas que acaparan todos los servicios, y de las neuras y horrores de la familia media al salir de su entorno para ir a parar a un lugar semejante. No es lo mejor de Candy, pero tenéis algunas risotadas aseguradas.
2. Para los bañistas, submarinistas, surfistas y otras faunas del mar: BARRACUDA (1978)
-¡Vaya, hace poco acaba de irse del hotel otro ingeniero de su compañía! Deben tener preparado algo fantástico para el pueblo...
-Mmm-hhm.
Corría el feliz año 1978, y Tiburón había dejado tras de sí las playas vacías, y las cajas registradoras de los cines llenas. Los imitadores, explortadores y sinverguenzas pretendían capitalizar aquel éxito a toda costa. Pronto surgirían orcas, pirañas, pulpos, tiburones y otros bichos varios a aterrorizar a los bañistas.
Barracuda es una producción bastante barata y donde, a pesar de cómo se vendió y lo que pueda parecer, el terror marino es lo de menos, y es el hombre el que aquí acojona más; y es que estamos ante una película de gran contenido ecológico y denuncia social contra las grandes corporaciones que vierten mierda en los mares. Manda huevos.
Varios submarinistas y bañistas han estado desapareciendo en una pequeña ciudad costera que vive, principalmente, del turismo; como espectadores sabemos que estos desaparecidos han sido atacados por ALGO en el mar, hasta morir asesinados bajo el agua. Y esos no son los únicos fenómenos extraños; masas de peces amanecen muertos en la orrilla, cosas a las que no es ajena una todopoderosa corporación que está haciendo "cosas" en el pueblo, en colaboración con el cacique local, que tiene una planta de industrias químicas.
El protagonista, un joven científico, biólogo marino, no tardará en olerse que el pueblo está a punto de sufrir una crisis, y se aliará con el sheriff local para investigar, aunque poco a poco se irán dando cuenta de que la envergadura del asunto les supera y mucho. Los peces, las barracudas asesinas, parecen haber sido alteradas de forma química, aumentando en tamaño y en agresividad, motivo por el que atacan a la gente.
Sin embargo, el objetivo no son las barracudas, ellas son los resultados; se han estado alimentando de desechos tóxicos arrojados por la empresa química al mar, pero esos residuos son producto de una cuidadosa investigación científica, apoyada económicamente por una misteriosa corporación relacionada con el gobierno; nada se sabe de ello, excepto el nombre: el Proyecto Lucifer.
Los protagonistas descubrirán que todo el suministro de agua potable del pueblo ha sido tratado con una sustancia que provoca hipoglucemia, un nivel bajo en la sangre que provoca un estado alterado de la mente, aumentando la agresividad, cosa que podemos ver desde el principio de la película en roces, peleas y pullas entre los ciudadanos. El objetivo de esto es tener preparada a una masa de ciudadanos americanos bien dispuestos a matar y morir por su país en caso de guerra, al respecto es totalmente aclarador el discurso del científico que ha creado la droga:
-Hay que evitar a los que protestan contra la guerra... a los objetores de conciencia. ¡El pueblo ha de aceptar la guerra! Ha de ser una válvula de escape para ellos.
Ese pelo... ese polo... ¡aaaargh!
Así, las barracudas atacan porque los residuos de la droga caen al mar, pero sus ataques están contados y en ningún momento son una amenaza, ni el motivo de la película, solo el reclamo. Los ataques se resuelven con recursos de sobras conocidos: movimientos bruscos de cámara, planos cortos de las mandíbulas, sangre en el agua, y ya poco más.
Vi esta película siendo un crío en Telecinco, un verano que pasé en Torrevieja, y desde entonces no la había vuelto a ver hasta ahora, pero la recordaba nítidamente por el final, un final increíble, incluso para una producción como esta. Un final totalmente setentero, que pongo en spoiler por si alguien no quiere ver la película, aunque yo la aconsejo. Si se asume que los bichos son una excusa que dura en pantalla a lo sumo, 15 minutos, estamos ante una película barata, llena de actores desconocidos, pero con un saludable tono de denuncia social, tan presente en la época, presentando un futuro negro para el ser humano.
Al final, el protagonista y el sheriff acorralan al jefe de la corporación, después de liquidar a tiros a varios de sus sicarios; consiguen llevar al mandamás ante los refuerzos policiales que habían llamado, pero para su (última) sorpresa, a una orden del mandamás son acribillados hasta morir por la propia policía. y FIN.
Mencionar que la película está protagonizada por Wayne Crawford, que tiene varios créditos en la película como corproductos, coguionista y responsable de las escenas subacuáticos; los ochenteros más recalcitrantes le recordaremos por interpretar al héroe sin par Jake Speed
3. Para los felices campistas: MOVIDA EN EL CAMPAMENTO (1985)
Es verano y hay que ir al campamento... a uno de los campamentos más míticos que existen en la cinematografía ochentera: el campamento Pinewood.
Allí se dirige Dennis (nuestro querido Michael J. Fox antes de hacerse un lío con el tiempo) el típico caradura que encandila a las mujeres gracias a una combinación de amoralidad, mentiras y mucho morro.
En el campamento tenemos todos los arquetipos posibles de este tipo de películas: el jefe de monitores, estirado, pijete, antipático, riguroso con normas y horarios, y enemigo natural del protagonista; el dueño del campamento, motivado por la competición y obsesionado por los valores y el espíritu deportivo de su campamento, así como su esposa insatisfecha y zorrilla, harta del bobo de su marido; no faltan, entre los niños, el espabilado, el que le tiene miedo a todo, el gordito, el chulillo, o el aspirante a poeta que sobresale cual rara fuera del agua.
Como toda película de campamentos, hay una serie de elementos que no pueden fallar, tienen que estar presentes sí o sí; los baños en el lago / río de turno, el campamento de las chicas, que por supuesto está "al otro lado del lago", el día de los padres, en que los familiares visitan a sus hijos en el campamento, o la competición final entre campamentos (la guerra de colores, la llaman aquí). Más tópicos ochenteros: el personaje de Fox se quiere trajinar a la nueva enfermera del campamento, que está de muy bien ver, pero ella está PROMETIDA (cosa que a él no le desanima en demasiá) y cuando finalmente, conozcamos al afortunado, este resulta ser un gilipollas pretencioso, pagado de sí mismo y al que le importa más su carrera que la adorable muchacha.
Vi esta película de niño, en verano, como tantas otras; en un mundo lejano y difuso en el que, cuando no había colegio, las televisiones hacían algo llamado "PROGRAMACIÓN INFANTIL": veréis, niños y niñas, ponían varias series de dibujos seguidas, películas para chavales, y programas preparados especialmente para los que estaban en casa; hoy te crías mamando de la caja tonta cosas como Sálvame
Fuera de este arrebato, la película cuando la vi, me pareció un despiporre mayúsculo y el colmo de la diversión. ¿Lo es, hoy en día? Hay que reconocer que lo primero, no. Después de ver tantas pelis juveniles salidas de madre (Porky's, Novatos, y sus aún más desvergonzadas imitaciones europeas o canadienses) queda bastante obvio que Movida en el campamento es una película muy, muy blanca y totalmente inocente; no hay apenas tacos, olvidaros de las tetas, todo es muy sugerido, supongo que por la mayor presencia infantil, y un intento de que la película llegara a todos los públicos; más "cine familiar" que para adolescentes.
Y aunque no es tan divertida como Los incorregibles albóndigas, ni tan entrañable como Faldas revoltosas, ningún ochentero debería perdérsela, los lugares y personajes comunes están ahí, demasiado nuestros como para perdérnoslos; nuestro Michael ya dando muestras de su talento, e incluso tenemos a un joven Adam Baldwin pre-Jayne en Firefly, pero mi personaje favorito de la película es Jerry: un chaval manipulador, liante y ladino que sabe manipular a todos, pequeños y grandes, y que en cuestión de días se convierte en el dueño de Pinewood. Cuando la vi de pequeño, era mi ídolo, vista ahora, sigue presente que si la película tiene algún mensaje, es que el caradurismo sale ganando. En cualquier caso, muy recomendable filme, y tuvo su secuela noventera: Campamento Cucamonga!!!
4. Para los estudiantes que se van de viaje: JUEGOS DE AMOR EN LA UNIVERSIDAD (1985)
Rob Reiner vuelve a aparecer por segundo año en nuestro menú veraniego; ESTA fue una de sus primeras películas, y a pesar del título en español (una vez más, los retituladores se lo inventaron, aunque en este caso no les culpo, pues el título original no es fácil de traductir al español y conseguir que quede bien) es mucho más que otra estúpida comedia americana.
La película empieza contándonos los últimos días de amistad de Gibson (John Cussack) y Lance (Anthony Edwards, uno de los Novatos originales) que tienen que ir a universidades distintas en estados distintos. Un año después, Gibson es un chaval igual de irresponsable e inseguro, poco talentoso y con escasas ganas de estudiar; como es incapaz de ligar y perder la virginidad, cosa que intenta precisamente con la persona menos indicada; Allison (Daphne Zuñiga) una estudiante seria, centrada, muy rígida... en última instancia su amigo Lance lo invita a viajar hasta su universidad en California, donde le promete que una de sus compañeras se acostará con él, esta es la "cosa hecha" del título.
Lo que Gibson no puede saber es que acabará viajando con Allison, que va a California a ver a su novio (un universitario obsesionado con el té); será el principio de una auténtica road movie, un viaje iniciático que no carecerá de problemas, y donde la improbable pareja irá transfiriéndose partes de su personalidad. Él descubrirá una inseguridad que ha intentado tapar, y ella, que es realmente incapaz de divertirse y soltarse, y acepta que esto no puede ser sano.
Como toda película de caracteres incompatibles obligados a convivir, ambos aprender cosas del otro; Gibson intenta enseñarla a beber cerveza, y ella, a tomarse la clase de literatura que comparten más en serio. Como toda buena road movie se van encontrando por carretera a una serie de personajes secundarios más o menos alucinados (el violador, o la pareja de Ned Flanders, donde Ned es... ¡¡¡Tim Robbins!!!).
A lo largo de su viaje, Gibson va teniendo una serie de fantasías fascinadoras con la chica que le espera en California para desvirgarle; pequeñas excursiones de su mente en las que se ve a sí mismo de vuelta de todo, adulto, experimentado; mientras que, en la realidad, esos cambios se vienen dando de otra manera, y por otras razones. Cuando finalmente, la pareja llega a California, acabarán descubriendo, cada uno por su lado, que las personas a la que iban a ver ya no les interesan.
Aunque las comedias románticas nunca han sido precisamente mi género favorito, esta funciona, quizá por lo mucho que rompe esquemas en algunos aspectos, llegando a convertirse en una película muy agradable de ver, lejos del típico film de sábado a mediodía; no es tanto una película de carcajadas como de sonrisas. Cussack está algo sobreactuado de más, con mucha mueca, pero cumple cuando se contiene, aunque aún le faltaban tablas; Daphne Zuñiga muy bien (me enamoró desde que la vi en La loca historia de las galaxias) y tenemos a secundarios como el citado Tim Robbins, o Viveca Landfords (la recordada Bedelia de Creepshow, o la tía de Frankenstein).
En conclusión, Juegos de amor en la universidad, recomendadísima, lo ya dicho: algo más que otra estúpida comedia romántica americana.
Y sí, he hecho trampas, porque los protagonistas se van de vacaciones de navidad, no de verano, pero coño, se van a California, que siempre están con la camisa hawaiana
5. Para los que se quedan trabajando en verano: THE FLAMINGO KID (1985)
¡Esta no la conocía! Gracias a Sorel por la recomendación
En cierta manera, mientras iba viendo The Flamingo Kid me iba entrando un deja vu importante, y al terminar de verla he llegado a la conclusión de que es muy, pero MUY El club de los chalados (Caddyshack) pero sin las toneladas de droga que corrieron por aquel rodaje.
Ambientada a principios de los años 60, se nos cuenta la historia de Jeffrey Willis (un Matt Dillon con su carrera en alza por aquellos lejanos días) un chico humilde de Brooklyn, hijo de un fontanero, que pasa el verano lo mejor que puede mientras espera para ir a la Universidad.
Un día. Jeffrey es invitado por sus amigos a ir a jugar unas manos de póker al exclusivo club Flamingo, con los hijos pijos de algunos socios. A pesar de su extremada falta de "educación social" y si incapacidad para moverse en un ambiente que le es extraño, acaba aceptando un empleo de verano que le ofrecen de forma fortuita, como aparcacoches. Esto levantará las iras de su padre, que le había conseguido un trabajo en una oficina, pidiendo un favor.
Poco a poco, siempre de forma fortuita, Jeffrey conoce a la gente, y consigue el patronazgo de Phil Brody (¡Richard Crenna otra vez) uno de los socios destacados del club, que organiza partidas de cartas de 500 dólares. Phil se queda impresionado al ver la soltura del chaval con las cartas, y poco a poco se va convirtiendo en su padrino; Jeffrey se convierte en "chico para todo" del club, recibiendo tantas propinas que casi gana más dinero que su padre.
Finalmente, Brody le convence de que tiene manera de vendedor, y que con sus dotes y una buena educación social, puede hacerse rico rápidamente; Jeffrey decide no ir a la Universidad, y seguir los consejos de su padrino por encima de los de su padre, que evidentemente se mosquea, pues quiere que el chico tenga una educación, que para eso ha trabajado el hombre toda su vida. Igual que en El club de los chalados, igual que en otras tantas películas (Wall street es otra que me viene a la mente) tenemos al "padrino" que representa la vida regalada, la riqueza rápida y fácil, aunque con consecuencias morales más o menos desastrosas, y al padre, de origen humilde y que representa la voz de la razón; el trabajo duro y la honradez son el único camino bueno a tomar.
Igual que en Malditas vacaciones, el asunto se resolverá en una apuesta, una partida de cartas donde, inevitablemente Jeffrey juega (en principio, por casualidad) en el lado contrario al de su padrino, y donde, inevitablemente también, acaban quedando solos los dos mano a mano.
Aprovecho para comentar que estoy conociendo a Richard Crenna, el ACTOR, más allá de su papel mítico, pero plano, como coronel Trautman, y me parece un actorazo con mil registros, le seguiré con mucho interés.
Y aunque The flamingo kid no tiene tetazas, tacos, ni figuras en plan "Los albóndigas en remojo" tampoco los necesita, ni su historia lo pide; no ha estado nada mal descubrirla, como una película, aunque previsible en lo suyo, entretenida.
Y con esto, terminamos. El top five ochentero-veraniego de 2015 está ahí; ahora vedlas, malditos
Cada verano veo The Sure Thing al menos una vez. Decid lo que querais sobre la nostalgia falaz y la falz memoria, de la que cada uno se fia a propia cuenta y riesgo, pero para mí, un verano sin muchas de estas pelis veraniegas no son lo mismo.
Lo que necesitamos es algo frío... frio como... ¿el acero?
Como siempre Morrison: que Dios te bendiga.
Tomo nota de las cinco películas veraniegochenteras. Barracuda, que es la única no ochentera, ya la he visto. Muy divertida, merece mucho la pena verla doblada, ya que es un lujo escuchar a los mejores barceloneses de le época. Después de verla te quedas como dice el alcalde de Amity: "bueno, ¿y qué?".
A la espera de darte el feedback de las otras cuatro, salud!
Joer... Barracuda tiene un doblaje que no es "casi" nada: Salvador Vidal, Constantino Romero, Ricardo Solans, Pepe Mediavilla, Elsa Fábregas... de tiempos en los que una película modesta, o incluso mediocre, podía contar con un doblaje de altura.
las otras nidea, pero SURE THING de Reiner esta muy bien en su mezcla de comedia golden age de guerra de sexos y el cine teen ochentero. Y avanza un poco su WHEN HARRY.
Flamingo Kid está editada en España, auqnue no me fio, ya que parece no anamórfica y editada por TEMA. Temblar...
En USA editada corretamente con subtítulos, al igual que Loverboy.
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Queda muuuuuucho trabajo por delante.
Me gusta mucho por toda la sordidez y oscuridad espiritual que transpira (apenas hay "buenos" solo malos y menos malos) acción a tope sin parar, y una moralidad gris total. La escena esa que mencionas entre Pusnisher y el chaval, hoy en día en el cine políticamente correcto es IMPOSIBLE de ver.
) producen esas pocas imágenes. Y ver la película no digamos. A muchos les parece muy raro cuando lo digo, pero ... me gusta más que "Suspiria".
Su casa DE VERDAD es una semi-ruina por donde pasan todos los que van a la playa, por lo que el prometido descanso no será tal.
