txemix
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http://www.elmundo.es/espana/2014/08/03/53dd5203e2704eb75e8b4584.html
Interior estima en 1.800 millones de euros la fortuna de la familia Pujol
- Afirma en un informe que el dinero procede de 'todo tipo de acciones delictivas'
- Gran parte de los fondos familiares ha acabado en Luxemburgo
- Ni siquiera la Banca de Andorra es capaz de 'determinar' la cuantía de la fortuna
- La familia tiene una parte importante a nombre de varios testaferros
- Los investigadores apuntan al cobro de comisiones como origen del dinero
Recuerdo que hace tiempo se dijo aquí que "la independencia es la solución definitiva para que nadie (ni aquí [en Catalunya] ni allí [en España]) puedan vivir del cuento".
El caso Pujol, ¿tumba ese argumento o más bien lo refuerza?
¿Habrían tardado menos tiempo en pillarle, o por el contrario habrían sido impotentes para investigarle en absoluto?
Contesto en este hilo porque creo que la cuestión se ha estado tratando aquí, más o menos en post #1042 y sucesivos, y concretamente posteñe mi opinion en el post #1064 y siguientes.
Añado este artículo de José Antonio Zarzalejos que considero muy revelador:
¿Qué coño es la UDEF?” El Estado, señor Pujol
Creo que deja bien clara mi tesis de que el Estado tolera la corrupción de los suyos o de quienes le favorecen, y en este sentido, se evidencia cómo la dependencia de España mantenia esta situación:
A Jordi Pujol, según estamos enterándonos estos días, se le consintió este continuo comportamiento corrupto mientras el ex presidente de la Generalitat se instaló en la política de “la puta y la Ramoneta”, es decir, en una soportable ambigüedad que no amenazaba la integridad del Estado. Durante décadas, Pujol practicó la política de “más vale pájaro en mano que ciento volando” (eso que los catalanes resumen muy bien en la expresión “peix al cove”, que es una forma excelsa de realismo). Pero en el momento en que -con los bolsillos no precisamente de cristal, unos hijos presuntamente corrompidos y un esposa que, dedicada a la jardinería, no había maceta catalana que se le escapara- decidió que se hacía independentista y respaldó a su delfín -Artur Mas- en su misión de vanguardia del secesionismo, el Estado sólo ha tenido que tirar de la cuerda que él mismo se puso al cuello hasta provocarle la asfixia.