A saber que emisoras escuchas...
Fueron unos cuantos colegas, se juntaron con el viejete, hicieron una paella... y ya. De hecho, no se enteró nadie hasta un mes después. Sigue siendo total y absolutamente inapropiado, pero eso de los tanques y los desfiles...
El Pais
Solo unas horas antes EL PAÍS se había puesto en contacto con la Dirección General del instituto armado para pedir explicaciones por la celebración que el pasado 18 de febrero, solo cinco días antes del 33º aniversario del golpe de Estado del 23-F, se produjo en el acuartelamiento que hasta este lunes mandaba el hijo del militar golpista.
El acto consistió, según las fuentes consultadas, en una paella y una exhibición de material y vehículos de la unidad, en cuya preparación participaron agentes de servicio.
¿Cómo es posible que Interior tardara un mes en enterarse de un homenaje a los golpistas en una instalación oficial? “Porque nadie nos informó”, alegan fuentes del instituto armado. “La Guardia Civil no se espía a sí misma.
La información la trasladan los jefes, que son quienes gozan de la confianza de los mandos superiores. Pero aquí la persona de confianza era el teniente coronel Tejero”, explican las fuentes consultadas.
La reunión no se celebró en el domicilio del teniente coronel, ubicado en el mismo complejo de Valdemoro, sino en las instalaciones del GRS-1 y
en los preparativos —compra de los ingredientes de la paella, disposición de mesas y sillas, montaje de la exposición de materiales en el polideportivo, etcétera— trabajaron miembros de la unidad, que tiene unos 300 agentes en total.
Periodista Digital
En total, unas 12 personas estuvieron presentes en el acto, que tuvo lugar cinco días antes del 23 de febrero y
en el que además de la conocida paella se realizó una exhibición de vehículos y material armamentístico.
20 Minutos
El teniente coronel Antonio Tejero Díaz, desde este lunes ex jefe del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) número 1 de la Guardia Civil, no reparó en medios para organizar la comida con la que agasajó el pasado 18 de febrero a su padre y a diversas personas implicadas en el fallido golpe de estado de 1981. Guardias civiles destinados en la unidad que mandaba Tejero Díaz, hijo del golpista condenado Antonio Tejero, hicieron de camareros en el almuerzo, una paella para unos 12 comensales, según fuentes consultadas por este diario. También organizaron las mesas en el comedor que tiene el GRS en el complejo de Valdemoro,
compraron los ingredientes de la comida y prepararon la posterior exposición de armas y vehículos con los que Tejero Díaz concluyó la comida del 33 aniversario del 23-F
La Razón
El acto consistió, según fuentes consultadas,
en una paella y una exhibición de material y vehículos de la unidad, en cuya preparación participaron agentes de servicio.
Hombre, lo que se dice tanques no. Vehículos.