Re: Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal(CRÍTICAS)
Enigmax dijo:
Talento sin medios equivale a un Schumacher sin coche
No pretendo que Schumacher gane un Gran Premio corriendo, pero tampoco necesitas tener el mejor coche, ni el siguiente, ni el siguiente... para ser muy bueno.
Cuando Michael Schumacher debutó en Fórmula 1 (en el circuito de Spa- Francorchamps, uno de los más complicados para los pilotos), no lo había pisado en su vida. A los mandos de un Jordan 191, logró la 7ª posición en la parrilla con lo que era un carrito de polos con alerón. A pesar de que el embrague de aquel cascajo se rompió en la primera vuelta, todo el mundo ya había visto lo que tenía aquel alemán: un talento para conducir descomunal.
La siguiente temporada, y ya con el Benetton-Ford, un coche mucho mejor que el Jordan, pero lejos aún de los McLaren-Honda de Senna y Williams-Renault de Mansell, ganó en el mismo circuito, siendo el único piloto en lograr una carrera sin un coche de estas dos escuderías en todo el año.
Dos años después, con el mismo coche y en clara inferioridad con otras escuderías ganaba el título mundial. Al año siguiente, repetía ese triunfo.
Volviendo al cine. Jorge Fonte afirma en la entrevista que
hacer una película, una buena película, es muy caro: falso. La historia del cine está llena de casos que contradicen esa frase. Está claro que necesitas una cámara, eso no lo voy a negar. Pero Jim Jarmusch rodó
Stranger than Paradise con $90.000; Kevin Smith se gastó en
Clerks $27.000, y Robert Rodríguez hizo la primera versión de
El Mariachi con $7.000 y mucho ingenio; lo mismo podría decirse de Almodóvar con
Laberinto de pasiones y de Amenábar con
Tesis, películas hechas con mucha imaginación y muy poco dinero.
Si Jarmusch, Smith, Rodríguez, Almodóvar y Amenábar hubieran creído que hacer una película
es muy caro, estarían ahora vendiendo palomitas en un multiplex. Afortunadamente para ellos, decidieron que la falta de dinero no les iba a impedir hacer cine, y por eso hoy están donde están.
No todo el mundo vale para dirigir, aunque tenga mucha afición, de la misma manera que no todos pueden ser Schumacher, aunque conduzcan muy bien. Primero hay que demostrar el talento, ya sea en cortos o en largos cutres en pasta, pero con imaginación; para los que lo logren, ya vendrán luego las vacas gordas.
El resto, como he dicho antes, son excusas de mal pagador.