Yo ya lo he dicho muchas veces, aunque al Manu le haga mucha gracia.
Hay un escenario completamente distinto
antes de la independencia, y
después de ella.
Antes de la independencia, todo el mundo estará en contra. Es obvio, porque en un mundo globalizado, los países quieren estabilidad, no cambios raros. Veremos a la Merkel y compañía avisando de que si nos independizamos seremos pobres, nos tendremos que comer los mocos y el Barça se disputará la liga con el Reus. La independencia de Cataluña no provoca ninguna simpatía entre los distintos gobiernos. Intentaran por todos los medios que se nos pasen las ganas, y es muy probable que empujen al gobierno español a conseguir un pacto con Cataluña. Hasta el último minuto se intentará mantener la unidad y la estabilidad, sea como sea, con propuestas de pactos o con amenazas. Hasta ahí, creo que todos estamos de acuerdo.
...PEEEEERO, en el caso de que todos los intentos fallen, que se proclame la independencia, y que el nuevo estado catalán administre sus fronteras, sus tributos y sus fuerzas de seguridad, el escenario cambia completamente.
En este escenario, vamos a caer mas simpáticos que antes? ...ya te contesto yo, Manu: NO. Simplemente, continuarán prevaleciendo los mismos intereses particulares que antes, el mundo continuará siendo igual de globalizado que antes, y en Cataluña continuarán habiendo un montón de inversiones extranjeras.
Entonces, qué sentido tiene para cualquier país europeo lesionar sus propios intereses para "castigar" a esa Cataluña díscola?
De verdad creéis que los estados piensan con los cojones? No parece más lógico intentar mantener la máxima estabilidad posible con la nueva situación creada?
Vamos, es que no estoy elucubrando nada. Es lo que ha ocurrido en toooooodos los procesos de independencia del mundo!.