Arrufat y Salellas, de la CUP; Munté y Pascal, de PDeCAT, y el exdirector de los Mossos d'Esquadra Pere Soler pueden ser imputados en breve
La actividad judicial sobre el procés no para y no se circunscribe sólo al control de las andanzas del expresident de la Generalitat Carles Puigdemont.
El magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena tiene sobre la mesa nuevos informes policiales que amplían el abanico de presuntos implicados en la “estrategia secesionista que provocó la declaración unilateral de independencia”.
Nuevos imputables
Estos informes sitúan de nuevo a los ya imputados en el punto de mira de la instrucción sumarial por rebelión, sedición, malversación y desobediencia. Además aportan los nombres de Artur Mas, Anna Gabriel, Mireia Boya y Marta Rovira a los que en breve se van a citar como investigados.
Pero además de todo ello, el resto de miembros del llamado “comité estratégico”, los directivos de la ANC, Òmnium Cultural y Associació de Municipis per la Independència, los directores de las oficinas de desarrollo del autogobierno y diversos diputados, aparecen con nombre y apellido en los atestados policiales como copartícipes en el diseño de la estrategia que debía de conducir a la independencia.
Así, nombres como Neus Munté, Marta Pascal, Quim Arrufat, Natàlia Sánchez Dipp, Lluc Salellas, Núria Gibert, Mercè Maturi, Natàlia Esteve, Neus Lloveras, Jordi Gaseni, Eudald Calvo y Agustí Alcoberro se sitúan en el punto de mira de Llarena quien, por otro lado, ya ha comentado a sus próximos que esta investigación no ha hecho más que comenzar.
De nuevo, los 'mossos'
Los últimos informes de la unidad orgánica de policía judicial vuelven a hacer hincapié en el papel “fundamental” de los Mossos d'Esquadra para ejecutar las normas de desconexión y por ello proponen la imputación de los ex directores general de Interior Cèsar Puig y Pere Soler.
Cada uno de estos nombres está siendo investigado policialmente.
Llarena amplía la investigación a otras 20 figuras del 1-O