La Diada 2012, ¿un antes y un después?

Cuando viajas

El año pasado decidí en vacaciones ir por Castilla a dar una vuelta por ciudades que no conocía. Me tocó cuenca y Toledo antes de que un infortunado incidente de un familiar cortara el viaje. Este año he estado en Segovia y escribo esto desde el parador de Salamanca. Estoy impresionado, boquiabierto. He visto la cuna de la civilización, la verdadera historia de España. Arquitectura visigoda, románica, árabe, gótica, renacentista, huellas culturales de siglos de historia común. Me ha hecho reflexionar sobre quienes somos en realidad y de donde venimos. Cuando pisas estas ciudades resulta sobrecogedora la sensación de que el mundo se decidía entre sus muros. Imponentes edificaciones, catedrales, murallas, castillos, bibliotecas, universidades, alcázares, monasterios, museos, puentes. Es arrolladora y abrumadora la sensación de trascendencia histórica del conjunto. Notas, si te despojas de fanatismos, que Cataluña fue parte de eso pero no tanto. Es una obviedad, aunque le duela a los que se creen el ombligo del mundo. Fue menos protagonista coetáneo y se ve claro, como también se ve claro que el rastro histórico de lo que se hizo y significó Cataluña es hermano gemelo de lo que hay en esas ciudades. Notas que la cultura en mayúscula bebe de las mismas fuentes, que los origenes de nuestra civilización son idénticas.

Las diferencias entre Cataluña y el resto de España son circunstanciales, son fruto de las distancias geográficas, del aislamiento propio de la época, no de un origen etnico distinto ni de valores ni de principios éticos y morales diferentes. El idioma no es fruto de la voluntad de diferenciarse sino del aislamiento geográfico de las comunidades y de las dificultades de interacción entre ellas. A pesar de algún sujeto que defiende que el catalán estaba antes que el latín en sus territorios es obvia la similitud de sus estructuras gramaticales, es obvio lo emparentados que están los dos idiomas. Cuando veía esas ciudades sentía que yo era hijo de lo que se cocía en esos lugares en épocas pasadas. Soy hijo de los movimientos culturales de esos años, hijo de su pasado, de su arquitectura, de sus tradiciones, de su forma de ver la vida. Me he sentido honrado y orgulloso de que esa historia sea mia también. ¿Quien no puede sentir orgullo de algo tan imponente? De algo tan majestuoso que fue levantado por tus antepasados.

El supremacismo actual del independentismo, esas ansias de agigantar las diferencias, de remarcar lo distinto, me parece, después de vislumbrar lo que hay detrás de España, de un provincianismo insultante propio del que no ha viajado y no sabe de qué está hecho el mundo. El mundo no eres tú y tu terruño, el mundo no eres tú y tus tradiciones locales. El mundo es la suma de la generosidad de tus antepasados, de la riqueza cultural que compartieron y que son la fuente de lo que hoy somos todos. Apelar al catalanismo renunciando a la universalidad y a la monumental trascendencia del españolismo histórico común me parece de una pobreza intelectual propia de la ignorancia más rancia.

Cuando viajas creces, por dentro y por fuera. Y aprendes. Siéntete parte de lo que es el resto de España y verás lo bien que te sienta. Y lo rico que eres.
 
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:hail:hail :palmas

Quien dijo eso del catalán y el latín ya tenía que ser muy fanático. El caso es que en España la diversidad es palpable y notoria, y eso le da una riqueza inigualable, en vez de usar esas diferencias como puntos de unión, hay quien parece empeñado acrecentarlas para separanos unos de otros. Los nacionalismos son identitarios y los indepentistas mas todavía, por lo que tienen que usar cualquier cosa como marcador, ya sea la lengua, la cultura, la sociedad. Además son insaciables, siempre quieren mas porque por definición ellos son el jodido centro del mundo. Pero no te engañes Seoman, hay quien no tiene remedio, el que es profundamente independentista viajará y en su ceguera lo único que verá será diferencias y por tanto reafirmará sus ideales.

La tara actual del independentismo viene precisamente de que hoy en día es un ideal romántico, los nacionalismos tenían su aquel a principios del siglo pasado. Su auge y sus devaneos nos costaron dos guerras mundiales. Desde entonces el mundo se ha movido hacia su superación, hasta hace unos años. Una clase política sin rumbo y sin objetivo claro, no solo a nivel nacional sino incluso europeo, con una perspectiva claramente económica ha dejado que los nacionalismos aprovecharan el resquicio y estos se han propagado como la pólvora, aprovechando el sistema y fagocitándolo desde dentro.

Como diría aquel "Vivimos tiempos interesantes" y de la respuesta que se le de a los nacionalismos sera clave en el porvenir del proyecto europeo. Por que si lo consiguen en España la única respuesta que darán será "quiero mas" :libro
:end
 
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Cuando viajas

El año pasado decidí en vacaciones ir por Castilla a dar una vuelta por ciudades que no conocía. Me tocó cuenca y Toledo antes de que un infortunado incidente de un familiar cortara el viaje. Este año he estado en Segovia y escribo esto desde el parador de Salamanca. Estoy impresionado, boquiabierto. He visto la cuna de la civilización, la verdadera historia de España. Arquitectura visigoda, románica, árabe, gótica, renacentista, huellas culturales de siglos de historia común. Me ha hecho reflexionar sobre quienes somos en realidad y de donde venimos. Cuando pisas estas ciudades resulta sobrecogedora la sensación de que el mundo se decidía entre sus muros. Imponentes edificaciones, catedrales, murallas, castillos, bibliotecas, universidades, alcázares, monasterios, museos, puentes. Es arrolladora y abrumadora la sensación de trascendencia histórica del conjunto. Notas, si te despojas de fanatismos, que Cataluña fue parte de eso pero no tanto. Es una obviedad, aunque le duela a los que se creen el ombligo del mundo. Fue menos protagonista coetáneo y se ve claro, como también se ve claro que el rastro histórico de lo que se hizo y significó Cataluña es hermano gemelo de lo que hay en esas ciudades. Notas que la cultura en mayúscula bebe de las mismas fuentes, que los origenes de nuestra civilización son idénticas.

Las diferencias entre Cataluña y el resto de España son circunstanciales, son fruto de las distancias geográficas, del aislamiento propio de la época, no de un origen etnico distinto ni de valores ni de principios éticos y morales diferentes. El idioma no es fruto de la voluntad de diferenciarse sino del aislamiento geográfico de las comunidades y de las dificultades de interacción entre ellas. A pesar de algún sujeto que defiende que el catalán estaba antes que el latín en sus territorios es obvia la similitud de sus estructuras gramaticales, es obvio lo emparentados que están los dos idiomas. Cuando veía esas ciudades sentía que yo era hijo de lo que se cocía en esos lugares en épocas pasadas. Soy hijo de los movimientos culturales de esos años, hijo de su pasado, de su arquitectura, de sus tradiciones, de su forma de ver la vida. Me he sentido honrado y orgulloso de que esa historia sea mia también. ¿Quien no puede sentir orgullo de algo tan imponente? De algo tan majestuoso que fue levantado por tus antepasados.

El supremacismo actual del independentismo, esas ansias de agigantar las diferencias, de remarcar lo distinto, me parece, después de vislumbrar lo que hay detrás de España, de un provincialismo insultante propio del que no ha viajado y no sabe de qué está hecho el mundo. El mundo no eres tú y tu terruño, el mundo no eres tú y tus tradiciones locales. El mundo es la suma de la generosidad de tus antepasados, de la riqueza cultural que compartieron y que son la fuente de lo que hoy somos todos. Apelar al catalanismo renunciando a la universalidad y a la monumental trascendencia del españolismo histórico común me parece de una pobreza intelectual propia de la ignorancia más rancia.

Cuando viajas creces, por dentro y por fuera. Y aprendes. Siéntete parte de lo que es el resto de España y verás lo bien que te sienta. Y lo rico que eres.

Con la riqueza cultural que hay en España que tantos no conocen... Menos mal que Seoman se quita la venda de los ojos.:babas

Hace doce años conocí a un chaval de Irún,con mucho dinero por una cadena de tiendas de alimentación de su familia,que proclamaba a los cuatro vientos que no tenía intención de vivir fuera de su patria chica.
Cito una de sus mayores barbaridades para que os riáis conmigo : "Estuve en Madrid viendo un partido del Athletic contra el Real Madrid en el Bernabeu y tuve tiempo para visitar la ciudad,en dos horas supe que no me gustaba". :mparto

Sus abuelos paternos eran de...Extremadura. De primer apellido era Sánchez y lo intentaba esconder como una mancha en su expediente inmaculado de "vasco de pura cepa". :inaudito

Menos mal que con los años le dio por viajar,tanto dentro como fuera de España,y ha evolucionado como persona.:lee
 
Cuando viajas

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Cuando viajas creces, por dentro y por fuera. Y aprendes. Siéntete parte de lo que es el resto de España y verás lo bien que te sienta. Y lo rico que eres.

Lo más curioso, es que el segmento de población catalana más independentista es precisamente el que vive y trabaja en el extranjero.

De todas formas, estoy de acuerdo contigo. Viajando te das cuenta de muchas cosas y se aprende muchísimo. Haces bien en recomendárselo a todos. Yo también lo hago.
Por cierto, también me he recorrido España un montón de veces, y ya que estás en Salamanca, ahí he estado tres veces. Es un país que me encanta.
 
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El año pasado decidí en vacaciones ir por Castilla a dar una vuelta por ciudades que no conocía. Me tocó cuenca y Toledo antes de que un infortunado incidente de un familiar cortara el viaje. Este año he estado en Segovia y escribo esto desde el parador de Salamanca. Estoy impresionado, boquiabierto. He visto la cuna de la civilización, la verdadera historia de España. Arquitectura visigoda, románica, árabe, gótica, renacentista, huellas culturales de siglos de historia común.

 
es muy sintomático del nacionalismo, como fenómeno decimonónico, prestar excesiva atención a la prensa -como fenómeno decimonónico también- en la defensa de sus ideas.

el mundo ha cambiado mucho, aun así, por cada opinión favorable y bien publicitada y compartida en el mundo indepe se pueden encontrar decenas no favorables que se ignoran a conveniencia.

tanto dan unas como otras, somos un estado soberano y no nos va a marcar nuestra Justicia una columna -o 200- del Spiegel.

en el resto de Europa no se presta atención a lo que se diga en prensa extranjera sobre sus países, en España se arrastran muchos complejos, compartidos con entusiasmo por ciertos sectores ideológicos.
 
Cuando viajas

El año pasado decidí en vacaciones ir por Castilla a dar una vuelta por ciudades que no conocía. Me tocó cuenca y Toledo antes de que un infortunado incidente de un familiar cortara el viaje. Este año he estado en Segovia y escribo esto desde el parador de Salamanca. Estoy impresionado, boquiabierto. He visto la cuna de la civilización, la verdadera historia de España. Arquitectura visigoda, románica, árabe, gótica, renacentista, huellas culturales de siglos de historia común. Me ha hecho reflexionar sobre quienes somos en realidad y de donde venimos. Cuando pisas estas ciudades resulta sobrecogedora la sensación de que el mundo se decidía entre sus muros. Imponentes edificaciones, catedrales, murallas, castillos, bibliotecas, universidades, alcázares, monasterios, museos, puentes. Es arrolladora y abrumadora la sensación de trascendencia histórica del conjunto. Notas, si te despojas de fanatismos, que Cataluña fue parte de eso pero no tanto. Es una obviedad, aunque le duela a los que se creen el ombligo del mundo. Fue menos protagonista coetáneo y se ve claro, como también se ve claro que el rastro histórico de lo que se hizo y significó Cataluña es hermano gemelo de lo que hay en esas ciudades. Notas que la cultura en mayúscula bebe de las mismas fuentes, que los origenes de nuestra civilización son idénticas.

Las diferencias entre Cataluña y el resto de España son circunstanciales, son fruto de las distancias geográficas, del aislamiento propio de la época, no de un origen etnico distinto ni de valores ni de principios éticos y morales diferentes. El idioma no es fruto de la voluntad de diferenciarse sino del aislamiento geográfico de las comunidades y de las dificultades de interacción entre ellas. A pesar de algún sujeto que defiende que el catalán estaba antes que el latín en sus territorios es obvia la similitud de sus estructuras gramaticales, es obvio lo emparentados que están los dos idiomas. Cuando veía esas ciudades sentía que yo era hijo de lo que se cocía en esos lugares en épocas pasadas. Soy hijo de los movimientos culturales de esos años, hijo de su pasado, de su arquitectura, de sus tradiciones, de su forma de ver la vida. Me he sentido honrado y orgulloso de que esa historia sea mia también. ¿Quien no puede sentir orgullo de algo tan imponente? De algo tan majestuoso que fue levantado por tus antepasados.

El supremacismo actual del independentismo, esas ansias de agigantar las diferencias, de remarcar lo distinto, me parece, después de vislumbrar lo que hay detrás de España, de un provincialismo insultante propio del que no ha viajado y no sabe de qué está hecho el mundo. El mundo no eres tú y tu terruño, el mundo no eres tú y tus tradiciones locales. El mundo es la suma de la generosidad de tus antepasados, de la riqueza cultural que compartieron y que son la fuente de lo que hoy somos todos. Apelar al catalanismo renunciando a la universalidad y a la monumental trascendencia del españolismo histórico común me parece de una pobreza intelectual propia de la ignorancia más rancia.

Cuando viajas creces, por dentro y por fuera. Y aprendes. Siéntete parte de lo que es el resto de España y verás lo bien que te sienta. Y lo rico que eres.
Hay quien viaja y se queda con que España son toros, flamenco y pueblos garrulos.

No todo cala igual en diferentes individuos.

Precisamente una de las grandezas de España es su diversidad.

El independentismo clama por crear nuevas fronteras, pero luego los cdrs rompen las barreras porque dicen no querer fronteras.

Tienen las ideas muy claras....
 
Un país sin fronteras con sus vecinos. ¿Qué puede salir mal? Joder, tienen que existir control de personas y mercancias, aduanas... o echar una verja si al lado tienes un Estado fascista que tradicionalmente te ha oprimido... Al enemigo ni agua.
 
pero luego los cdrs rompen las barreras porque dicen no querer fronteras.
Calla, que la cosa es más divertida. Por lo que se ve uno de esos de Tabarnia ha puesto una imagen de un corte de carretera en Mexico, haciendose pasar por un CDR y una carretera de Cataluña. Naturalmente semejante troleo era fácil de detectar. Pues bien no son pocos dentro del independentismo que están diciendo, aprovechando esa tontuna, que eso de las barreras no es real, que es un invento del "unionismo" para desacreditarlos. :mparto


echar una verja si al lado tienes un Estado fascista que tradicionalmente te ha oprimido
Esa es otra, cómo mantienes relaciones y fronteras si tu principal argumentario para separarte es que estás en un país fascista y dictatorial. Es decir, eres facha hasta que me separe... :chalao
 
El mundo indepe esta regido por payasos , no hay nada que hacer y razonar con ese mundo...

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