El problema es que el precio no lo ponen las exhibidoras (de ahí que ganen realmente dinero con las chuches y otros pluses), sino las distribuidoras. Una vez limpio de impuestos y tal, a la exhibidora le queda a veces el 20% del precio de la entrada.
Es un porcentaje arbitrario, va mutando en función del contrato con la distribuidora, a veces se pacta un 50-50, otras veces un 60-40 y otras muchas un 80-20 que se invierte en el tiempo. Así, durante las dos primeras semanas la distribuidora se lleva toda la pasta grande, quedando al cine las migajas.
Además de que el contrato con una gran distribuidora por parte de una gran exhibidora exige una serie de compromisos. Tragarte 10 pelis de "estreno técnico" para poder poner ese gran taquillazo, entre otras. El VPF (que sufren sobre todo las pequeñas distribuidoras y ese pequeño cine que no tiene cabida en las multisalas), y otras zarandajas.
Según leo, esta iniciativa, pese a que parte de la "industria", en realidad está patrocinada por varias marcas comerciales. No deja de ser un experimento comercial, que parece que les ha salido "demasiado bien" a tenor del éxito, pero que también ha tenido un efecto "queja" por parte de la ciudadanía, que apoya el evento yendo en masa como una especie de protesta "coactiva".
La parte perversa que me viene a la cabeza es: ¿Y si esas marcas patrocinadoras en realidad pagarán el resto de la entrada a las distribuidoras?. Es una tajada importante, aunque aún lo es más los "inesperados" ingresos que van a obtener estos tres días. Es algo que no se sabe ni se sabrá, pues al final al público lo que le queda en la mente es que el cine les está costando 3€, cuando lo habitual en Madrid capital son 9€ (de media, sin promociones)
Está claro que los precios actuales de las entradas son inasumibles. Una familia de cuatro miembros que quiera ir al cine un Sábado, tendría que gastarse 40€ en entradas, y si juntamos las palomitas, ya ni te cuento. Quizás para los pudientes eso no son más que migajas, pero aquí un servidor no piensa gastarse ese dinero NI DE COÑA. Es más, por esos 40€, prefiero esperarme al Bluray, me sale más barato y puedo verlo las veces que quiera en mi casa.
He estado leyendo bastantes artículos tanto de opinión como de crónicas, opiniones de unos y de otros...prácticamente todos celebran el hecho de la promoción, y que está siendo un éxito desbordante está más que claro.
Pero sin embargo, la incógnita está en saber si la gente acudiría más al cine si se estableciese un precio de este estilo de forma continuada. Nadie lo sabe. La teoría dice que sí...pero son teorías.
Yo empezaría por eliminar ese plus extra por el 3D. Es absolutamente injustificable a día de hoy. Yelmo al parecer ha dado un primer paso y dice que no cobra el suplemento 3D.
Lo mismo sería aplicable a las salas iSense/Atmos y similares, que son una inversión del cine, y como tal tienen que asumirla ellos. Es como si nos pretendiesen cobrar más porque la peli sea en color o porque tiene 5.1. Ridículo, ¿verdad?.
Y por último, establecería un precio de 4€ de Lunes a Jueves. Sin condiciones perversas. Tal cual. Y entonces veríamos el verdadero interés de la gente.
Son demasiadas variables a tener en cuenta, pero la mayoría de gente es partidaria de que bajen los precios. El discurso sobre que la piratería hace daño al cine ha quedado en un cuatro plano, no se discute. Es la demostración fehaciente de que poniendo un precio popular, las salas se llenan.