MI NUEVO CUADRO DE PREVISIONES ¡TREMENDO! CADA VEZ VAMOS A PEOR
Les dije que sería a mediados de mes. Me he adelantado un poquito. Aquí tienen las previsiones para el reino de los macroagregados que se indican en los años que se detallan (Nota Azaris, es el mismo cuadro que antes pego bokeron, lo repito para no tener que pasar de pagina)
Antes de seguir miren el cuadro de arriba con detenimiento y reflexionen.
Hay tiempo de sobra. Tremendo, ¿verdad?. Es ir a peor, peor. Estamos hablando de una crisis en toda la extensión de la palabra, una doble crisis: de subconsumo y de sobreproducción en una atmósfera en que la productividad puede continuar creciendo (lo hará), por lo que el desempleo aumentará y los precios de todo se deprimirán al no haber demanda para cubrir prácticamente ninguna oferta que no sea la de bienes de primerísima necesidad. ¿Lo financiero?, Uds. mismas/os deduzcan. Esto es aplicable a todas partes, pero aquí, en el reino, más. Veamos. ¿Qué ha estado generando el PIB español durante estos pasados años?. …….. ¿Cómo van a comportarse esos subsectores durante los próximos? ¿Qué creen Uds. que va a suceder con la construcción?, ¿Cuántos automóviles piensan que van a salir de las plantas de ensamblaje distribuidas por el reino?, ¿Qué destinos turísticos van a ser escogidos por una población europea también atenazada por la crisis?
¿Políticas keynesianas?, financiadas, ¿con qué?, ¿con una deuda pública que cada vez va a ser más cara y que crecientemente va a tener que competir con otras deudas de otras economías que, posiblemente, optarán por la misma salida?. Veámoslo de otro modo. Ahora vamos a decrecer porque durante años hemos crecido ‘a futuro’, con el problema que tiene dejar las cosas para mañana.
El modelo de crecimiento del mundo mundial durante estas últimas décadas ha estado basado en el consumo (el de unos países más que el de otros), pero el de España, en proporción, mucho más. Por el lado de la demanda, el 60% del PIB del reino ha estado generado por el consumo, pero un consumo que era por un valor que no se correspondía al de la oferta producida aquí. Cuando una española o un español adquirían a crédito un BMW, estaban comprando un bien importado con un dinero que no tenían; pero por el lado de la oferta, la economía española no tenía ningún BMW que exportar, ni, tampoco, que diseñar ni que fabricar.
España (y otros países pero ahora hablamos de España) ha estado viviendo de forma desequilibrada: consumía unos bienes y unos servicios importados de un valor añadido mayor de los que producía, bienes que, además, fabricaba con un reducido nivel de eficiencia, con una tecnología en parte, importada, y con una energía mayoritariamente traída de fuera, unos bienes importados que pagaba con unos fondos que alguien le prestaba.
Dejando al margen lo ineficiente que es (para todo el planeta) fabricar cosas e infrautilizarlas porque el crecimiento del modelo se basa en el consumo-de-cosas-aunque-se-infrautilicen, en el caso de España se agrava porque,
1) la oferta española de bienes es de bajo valor,
2) es una oferta de bienes muy ligados a la coyuntura internacional,
3) es una oferta producida por un tejido muy poco capitalizado,
4) de bienes y servicios muy intensivos en factor trabajo,
5) España tiene una población excesiva e insatisfactoriamente cualificada para una época como la que viene en que la productividad será el elemento central del modelo.
Es sintomático que el presidente del Gobierno del reino haya dicho que el problema es ‘la atonía de la demanda’; él, al igual que muchos otros políticos -el primer ministro británico, sin ir más lejos- continúan proclamando el mismo mensaje: ¡Consumid!, y los tiros ya no van a ir por ahí
(Nota Azaris, a Montilla el otro dia le escuchaba reclamando la 'responsabilidad del consumidor catalan' para que la campaña navideña sea buena...increible, los politicos ya casi 'rogando' que consumamos...) . A algunas economías les va a costar muchas lágrimas cambiar, otras, ¿cuándo lo conseguirán?.
Santiago Niño Becerra. Catedrático de Estructura Económica. Facultad de Economía IQS. Universidad Ramon Llull.