Buen episodio, bastante buen en realidad, centrado exclusivamente en el regreso de los Oceanic Six a la isla.
¿Cuánto hacía que no empezaba un episodio con un ojo? Y vamos, cuando he visto a Jack, trajeado y tirado en la selva, oyendo gritos de auxilio... he pensando lo peor/mejor, lo que ya se ha teorizado por aquí... que fuese el regreso al primer episodio, un bucle temporal acojonante. Afortunadamente (o no) era una pequeña jugarreta de los guionistas.
Un poco decepcionante lo de El Faro y la señora Hawkins, aunque Desmond por fin empieza a tomar las riendas. Cuando manda a tomar por culo la isla y lo que haga falta, dan ganas de aplaudir. Sun, Sayid y Kate tan sosas como siempre, pero me encanta ese entrañable momento con Hurley decidido a salvar pasajeros comprando todos los asientos que puede. Sorprendente y divertido cameo de Jeff Fahey (Lapidus), irreconocible sin barba ni greñas. Pero el que se gana el episodio es Jack, protagonizando los dos momentazos del capítulo: la conversación con el cadáver de Locke mientras le pone los zapatos y sobre todo la carta de suicidio. El próximo capítulo huele a mítico: tras cuatro temporadas y media adorando a Locke, tenemos que ver como el pobre Jeremy Bentham es arrancado de la isla, pasa tres años probablemente desesperado y termina ahorcándose (joder, espero que tengan huevos de enseñarnos ese momento; directo a lo mejorcito de la serie) tras escribir esa brevísima carta.
Y el puntazo: Ben, forrado a tortas (¿es que no paran de lloverle hostias a este tío?) y empapado en sangre, llama a Jack después de "cumplir una promesa a un viejo amigo". ¿Qué promesa, y qué viejo amigo? Bueno, pienso en ese "I'm here, Charles, to tell you that I'm going to kill your daughter".
PD: ¿y ese Jin vestido de Dharma al final?