Yo recuerdo haberme topado con alguien con manías de esas tipo TOC, en una de las empresas donde trabajé. El señor parecía bastante delicado, y metía en el cajón el teclado y el ratón, luego cuando al dia siguiente entraba, sacaba los artilugios y los limpiaba con un algodon de estos que usan las mujeres para limpiarse la cara, mojado un poquito en alcohol.
Despues cuando iba al servicio sacaba un cllinex y abria la puerta para entrar. Lo que no sé es que haría a la hora de sentarse para evacuar. Pero fijo que lo hacía en cuclillas
Otra cosa que recuerdo, es que era una de esas oficinas grandes de aquella época, totalmente diáfanas, y enmoquetada parcialmente, entonces cuando pasaba de una zona sin enmoquetar andaba normal, y cuando pasaba a la otra, entonces arrastraba los pies, como si se los limpiara o los pasara por el felpudo.
Al hablar por telefóno procuraba no ponérselo en la oreja. Así que si la llamada era de tipo confidencial, pegaba unas voces tremenda, con lo cual la presunta confidencialidad se iba al garete.
En fín, un tipo extraño y singular.
Despues cuando iba al servicio sacaba un cllinex y abria la puerta para entrar. Lo que no sé es que haría a la hora de sentarse para evacuar. Pero fijo que lo hacía en cuclillas
Otra cosa que recuerdo, es que era una de esas oficinas grandes de aquella época, totalmente diáfanas, y enmoquetada parcialmente, entonces cuando pasaba de una zona sin enmoquetar andaba normal, y cuando pasaba a la otra, entonces arrastraba los pies, como si se los limpiara o los pasara por el felpudo.
Al hablar por telefóno procuraba no ponérselo en la oreja. Así que si la llamada era de tipo confidencial, pegaba unas voces tremenda, con lo cual la presunta confidencialidad se iba al garete.
En fín, un tipo extraño y singular.