Respuesta: RAY HARRYHAUSEN, el Maestro de las Criaturas
Entre éstos y los anteriores, Harryhausen trabajó en
El gran gorila junto a su ídolo O'Brien y eso sin duda redefinió su trabajo. Tras estos cortos saltó definitivamente al cine con
El monstruo de tiempos remotos (una de sus creaciones más icónicas y entrañables)... y ya sabemos el resto de la historia.
Sigo.
THE STORY OF LITTLE RED RIDING HOOD (1950)
La sublimación de lo visto en los Cuentos de Mamá Ganso, aquí adaptando la historia de Caperucita Roja con un tino envidiable y un sentido estético absolutamente clásico (para bien). Hay mucha atención al detalle, sobre todo en cuestión de decorados y fondos (atención al plano que abre el corto, la casa de Caperucita, o a la decoración de la casa de la Abuela). Sigue practicando con las texturas, y aunque hay cosillas algo toscas (los brazos y piernas, la piel es de lo más difícil de recrear) sí se luce por ejemplo en el travelling lateral cuando la niña entra en el bosque o en el primer encuentro con el Lobo. Ah, el Lobo... personajazo que incluso deja un altercado en la casa con la Abuela tirando muebles o esa muerte en elipsis.
Incluso saca oro de las limitaciones técnicas: no hay sincro labial ni diálogos, así que integra perfectamente la voz en off y la música con la narrativa de cuento; los personajes cambian de expresión mediante fundidos, aumentando el tono de fábula... los recuerdos los recrea con transparencias... Un gran trabajo, y ya totalmente orientado a lo cinematográfico.
THE STORY OF HANSEL AND GRETEL (1951)
Quizá el mejor de toda la colección, o al menos el más redondo; Harryhausen ya totalmente tirado al cine del momento, con la cámara moviéndose en cada escena, presentación de personajes apoyada en lo visual (el chistecillo que introduce a Hansel, los planos del padre hecho polvo al llegar a casa) y la música/voz en off rellenando los huecos. Me juego algo a que Harryhausen es fan de Ford porque hay aquí momentos, sobre todo en su primer tramo, que son puro tuerto (esos planos de familia, esa jarra de leche).
Los niños son muy entrañables, con esas caras americanísimas (no se me ocurre otra forma de llamarlas), pero la palma se la lleva la bruja; la vemos maquinando, amargada, es siniestra. La animación está más pulida (atención al conejo corriendo) y la atención al detalle es de ver el corto varias veces: esa casa de caramelo hecha, me lo huelo, de galletas de verdad, o la cabaña de los protas llena de instrumentos y muebles. Una absoluta delicia.
THE STORY OF RAPUNZEL (1952)
Otro gran trabajo, pelín menor pero muy logrado con sus truquitos de escalas, el decorado de la torre por dentro y por fuera... y sobre todo, un trabajo logradísimo de animación. El uso del pelo es fascinante (creciendo, trenzándose mágicamente, sirviendo de cuerda...), tenemos otra bruja carismática y un príncipe con un trabajo acojonante de expresión corporal, quizá el más notable de todos estos cortos, diciendo más por cada momento del personaje que la propia voz en off... además del trabajo de expresiones faciales, mezclando los fundidos (encantadores) con la inmediatez.
Atención también al trabajo ya totalmente cinematográfico, con ángulos torcidos, desenfoques, esos "exteriores" de roca y miseria en el último tramo... Viendo estos estupendos diez minutos no dejaba de pensar en el trailer de
Tangled.
Me quedan todavía un par de cortos... To be continued.