Y todavía ayuda más a destacarla leer a Pan Metron más que satisfactorias explicaciones a lo que yo creía cagadas de guión.
¿PAN se
inventa las explicaciones y vosotros os las tomáis en serio?
MAL, eh...
No, no, después de verla por segunda vez busqué opiniones, interpretaciones por ahí y, por ejemplo, casi todo el mundo se queja del momento "vamos a follar" de Stringer Bell y Charlize, que no pinta nada dicen, que sobra y Pan Metron lo clava directamente: es para que veamos que, por sus celos hacia David, Charlize se comporta como un robot hasta tal punto que el capitán llega a pensar que es un robot, añadiendo un poco más de salsa dickiana al conjunto.
Lo que comenta de la expedición inútil para cubrir el expediente también tiene sentido, el viejo sólo confía en David (magnífico personaje, tanto por su interpretación como por su analogía con la creación) por lo que los mercenarios no tienen porque ser de lo más inteligente, de ahí los dos capullos haciendo el ridículo en la cueva, probablemente con el biólogo borderline intentando impresionar al punkarra con su dominio de los animalitos.
La primera parte se alimenta de filosofía, mito, misterio y curiosidad por lo desconocido.
Y la segunda parte, gracias a la suma de personajes límite, con el científico alcohólico, la fanática religiosa, la hija reprimida y celosa, el androide explorador "Lawrence de Arabia" entre dos culturas, el carismático capitán "sheriff" de vuelta de todo, es una bizarrada non-stop, caótica, con bichos de todo tipo, ingenieros cabrones, cesáreas, viejos ambiciosos e inmolaciones.
Todo esto, incluso con su evidente herencia de la saga Alien, le da una entidad propia a la película fascinante y (eso ya me gustó en el primer pase) un conjunto de nuevas preguntas a responder como el líquido negro, el porqué del galimatías dentro del templo 2000 años atrás o el porqué nos crearon y porqué nos querían destruir.
Es el mejor Scott desde Blade Runner con diferencia.