En mi oficina, tenemos seguridad privada contratada, y este verano vino un chico nuevo a sustituir al titular que estaba de vacaciones, y el primer día a las dos horas de servicio el tío sin avisarnos a nosotros y a su empresa, se piró sin dar ninguna explicación. En 20 años que lleva contratado el servicio jamás nos había pasado, de hecho, nos preocupamos porque llegamos a creer que algo le había pasado. No le pasó nada, se piró sin más...y mira que en mi oficina se está bien para lo que es el trabajo de seguridad, que no es un sitio chungo, ni conflictivo, y además con horario de funcionario, pues nada, se largó y nos dejó tirados sin nadie en la entrada para controlar un poco el acceso con cosas como la confirmación de las citas previas y la entrada de bicis y patinetes, que es básicamente lo único que tenía que hacer, lo único, y eso que para facilitarles el trabajo se les dice que si viene algún pesao que quiere sí o sí meter el patinete o la bici, que oye, que no es plan de salir a ostias por una tontería y que no se complique y les deje pasar.
Lo que sí que nos ha venido alguna ve es el típico impresentable que coge y se va al bar de enfrente y tenemos que ir a decirle que oye, que ya está bien, que el servicio se hace en la oficina, no desde el bar. De es@s nos han video unos cuant@s, pero coger de buenas a primeras y pirarse, eso no había sucedido nunca.