Magnolia dijo:
Bien, pues allá voy. A mí no me ha desagradado, pero ya prácticamente se me ha pirado de la mente. ¿Por qué? Obvio: porque no se puede hacer una película con tanta falta de raíces, tanto batiburrillo, tanto homenaje impostado y tanta hipocresía.
WALL-E quiere contentar a propios y extraños, y creo que de concepto no lo hace a nadie. Sus homenajes supuestamente serios y comprometidos (Kubrick, Solaris, etcétera) se mezclan con la pantomima más descarada (Cortocircuito, sí, era cierto) y luego, en un giro que aún trato de entender, se van al Disney más rural y fantoche...., cosa que ya iba preparando con el exceso del gag slapstick en la parte supuestamente autoral.
Técnicamente está conseguida y todo el equipo cumple muy bien, pero Lasseter, autor que sólo me contentó en Toy Story, no sabe de nuevo para donde tirar ni para quién cumplir.
En definitiva: una propuesta errónea desde el concepto artístico (porque es una cobarde) y torpe desde el punto de vista industrial (su target es tan difuso que desaparece) que sólo permanece algo como rara avis, pero aún así tiene mucho de espejismo.
La primera media hora parece un pseudo-remake del final de I.A. y el discurso está a una altura genialoide. Un ritmo lento, clasicista, acompañando de planos casi casi de western fordiano o película grandilocuente a lo David Lean. Como ejercicio de estilo esta primera media hora, hasta que E-VA se va a la nave, es literalmente brillante y cinematográficamente lo mejor que ha producido PIXAR. Es, en efecto, cine mudo, pero no cómico; casi clasicista en su concepción y planos.
Como tal, en esta primera media hora el niño se duerme, y es cuando los ejecutivos de Pixar cuales HAL9000 de la nave matriz meten la parte bufa para salvar el producto y contentar a los obesos (nosotros, según el film...)
Y es cuando empieza el cuasi-remake mudo de Monstruos S.A. Aquí la película, perdonen, se me hunde porque CONOZCO todas las referencias. Si Solaris e I.A. sobrevolaban la primera parte, aquí el discurso se anega a lo bestia de 2001 (vergonzoso el timón HAL...), de una historia corta de Harvey Kurtzman (luego les pongo una viñeta), del caos chapliniano de la fábrica, de anticapitalismo y anticonsumismo garrafa (es muy hipócrita la peli al hablar del consumismo y ser un producto en sí...).
¿Por qué no llega a hundirse del todo? Porque, en definitiva, los personajes de la primera parte son demasiado poderosos, demasiado bien perfilados, como para resultar una obra menor. Toda su relación amorosa salva un film atiborrado y afectado de referencias que anegan el discurso.
Como conjunto Ratatouille es mucho mejor, menos ambiciosa pero más honesta. Y como película infantil es un fracaso rotundo, y creo que Lasetter acabará haciendo Toy Story 4 o 5 como no rectifique las recaudaciones de Ratatouille -que ya lindaba con la comedia para adultos-.
¿Qué nos queda? Esa maravillosa primera media hora, que reducida a mediometraje, simplemente finalizada con la huida de E-VA de la Tierra, sería con diferencia lo mejor producido en Hollywood en el 2008.
En fin, sensación agridulce.
PD. La viñeta de Kurtzman: