Respuesta: Woody Allen's post
Hannah y sus hermanas: film con el que nunca comulgué y siempre me extrañó, porque era de su mejor época y ayer, tras dos visionados, paso a comentarla.
El problema mayor de este film reside, a mi parecer, en que no avanza en absolutamente nada de los aspectos anteriormente vistos en Allen. Es un Manhattan más cargado y, encima, empieza la etapa Di Palma, un temible director de foto que ilumina televisivamente y que mueve la cámara más de la cuenta y encima de manera desaliñada. Aquí se vuelve a ver más que nunca el hecho de que las pelis de Allen están dirigidas según quién le ilumine, el problema es que este hombre no es Willis ni algunos otros grandes y delegar aquí ya es menos inteligente. Por ello, entre los zooms marca de la casa y el acabado visual, el aspecto no pasa de capítulo televisivo de lujo en el contexto, que no es decir mucho.
En cambio, el uso de las localizaciones es excelente y aquí se vuelve a sacar un partido brutal a cada esquina neoyorkina. Eso y la utilización de la música (ya clásico) es lo mejor de un film con otros diversos errores.
La verborrea, aquí es incesante. Salvo en la fiesta del principio (donde la usa maravillosamente) o en el capítulo más interesante (el de Caine y Hersey, salvo su odioso desenlace), Allen se empeña en no dejar ni un frame de película sin palabra y muchas veces lo forzado preside el film. Una cosa es buscar estilo y otro cargarlo.
También está muy presente la pretensión de cruzar demasiadas vidas y este hombre no es precisamente Paul Thomas Anderson para ello. Lo coral (basado en Tres Hermanas claramente) renquea mucho, abarca demasiado apretando y da una sensación exagerada de no haber conocido a nadie durante todo el metraje, cosa que no suele pasar en las películas de Allen, precisamente. Una frialdad no buscada y con poca riqueza. Por poner un ejemplo concreto, toda la historia de Allen no pinta un carajo en este film y su desenlace para hilarlo con el resto da tanto asco como el de todos los personajes. Y así prácticamente con todos, unos más y otros menos. Porque atención al personaje de Sydow, metido con absoluto calzador Bergmaniano y que pasaba por allí, como quien dice (no hay más que ver cómo desaparece. Y lo mismo con Leia Fisher. Todo un fracaso de entramados y resoluciones. O de Vidas Cruzadas.
Por no hablar del recurso de parvulario: pensamientos en alto "voz en off". No daba crédito cuando lo usaba por primera vez, pero es que acaba usándolo constantemente en toda la película y a estas alturas. O el tono, que casa con demasiado batiburrillo drama+comedia.
Los aciertos antes citados y una dirección de actores excelente no son suficiente para tal cúmulo de despropósitos y diez asquerosos minutos finales donde Allen se empeña en, forzando aún más la máquina, resolver todas las historias con un happy end inverosímil y putrefacto, insólito en su cine. Y es que ya lo dijo él sobre este film y ahí sí acertó de pleno: "he hecho algo mal. Ha sido un éxito popular a todos los niveles". Woody, tú eres muy listo...¿qué esperabas con esto?