Crónica del ASC Master Class, día 2:
Una de las cosas que no comenté respecto al día de ayer fue algo relativo a los alumnos. Soy el que ha ido desde más lejos, aunque hay un chico italiano que vive en Londres, un argentino y un colombiano. Pero el tema es que uno de los estudiantes americanos me sonaba mucho. Y las dos o tres primeras veces que me crucé con él pensé que me recordaba a alguien, sin caer en de quién se trataba. Y de pronto, en la clase de Robert Legato, éste habla directamente con el alumno, en un momento en el que hablaba de las actuaciones en el entorno virtual de “Avatar”, y le dice “Giovanni, tú sabes mucho de esto”. ¡Coño, es Giovanni Ribisi! ¡El actor! ¿Qué demonios hace aquí un tío que ha trabajado con Spielberg, Lynch, Sofia Coppola, Michael Mann o Tom Tykwer? Lo bueno de estos talleres es que mañana mismo tendré la oportunidad de preguntárselo, supongo que es que quiere dirigir o algo parecido. Está muy metido en la materia y sus preguntas superan en interés, y por mucho, a la media de las que estoy escuchando. Pero, en cualquier caso, la expresión "What the Fuck?" se acuñó para algo como esto, estoy seguro.
Día 2: se trataba del taller de iluminación y cámara (Alexa XT), con John Toll como director de fotografía y Robbie Greenberg, que ejerce de director. El lugar, la central de Mole-Richardson en el corazón de Hollywood, con un gran soundstage para trabajar. Me había ofrecido a ayudar en el workshop, y rápidamente me informan que formo parte del “Film Crew 1”, junto con otros dos estudiantes. Tras repartir papeles, me cae en gracia ser el “First Camera Assistant”, “Focus Puller” o, entre nosotros, el foquista. Un marronazo, puesto que ¡jamás en mi vida he hecho el foco, ni siquiera medirlo con una cinta, y me encuentro ante mí con un zoom Arri Alura marcado en pies (y no metros) y a las órdenes de John Toll! Me siento como si fuera futbolista y debutara en la final de la Champions League. Me toca además cambiar filtros o modificar el diafragma según me indica Toll. La primera toma, bellamente iluminada con una luz de arco de 225 amperios (nada de “tonterías” como HMIs!) va desde un plano general a un primer plano de nuestra actriz subidos en una Dolly y, tras el acojone inicial, no se me da mal del todo. Pero la segunda escena consiste en una toma, cámara al hombro, por unos pasillos, con la chica viniendo desde 20 pies de distancia a foco mínimo, para después volver a marcharse hasta los 5-6 pies. Tras la tercera toma, en la que pensaba que la había liado seguro, ya que la chica vino mucho más rápido hacia cámara, Toll se me acerca y me dice “Great Focus”, de modo que pienso que es irónico y tras preguntarle “Really?” me asegura que “it was perfect!”. En fin, momentos de esos que no se olvidan, por mucho que igual que me ha salido bien, era mucho más fácil haber hecho el ridículo absoluto.
El esquema de luz utilizado, en realidad, ha sido bastante simple, con luces al fondo de pasillos o rebotadas, para crear un ambiente natural pero atmosférico. Llama la atención que Toll no usa fotómetro, ni histograma, ni False Color, ni Waveform, cosa que me ha confirmado en el “Questions And Answers” posterior, y que confía en su DIT si se le marcha un poco la exposición más allá de lo conveniente. Ilumina y juzga en el monitor, varía el diafragma de toma a toma, no sobreexpone para bajarlo luego en post-producción, ni nada demasiado técnico, y de hecho rechaza ser un director de fotografía técnico.
Después, he conseguido que tanto él como Robbie Greenberg –un tipo encantador, ¡que incluso se ha traído a su perro Otis al rodaje!- me firmen mi ejemplar del libro “Cinematographer Style” en el que aparecen sus entrevistas, he incluso he tenido tiempo de hablar algo más con Greenberg y, de nuevo, con Stephen Burum, quien me confirma que pasó 9 meses en Filipinas rodando y dirigiendo la 2ª unidad de “Apocalypse Now” y me confirma que Brian De Palma –con el que hizo 8 o 9 películas- le daba libertad absoluta para iluminarlas.
Así que, de nuevo, un gran día, y ahora me voy a dormir feliz.