Nos acercamos al final del camino y el sistema está prácticamente listo.
Aprovechando que Microsoft ha presentado esta semana el October Update de Windows 10, he realizado una instalación limpia de la última versión 20H2, que funciona a la perfección en mi equipo.
Para conseguir que la instalación desde el pendrive sea capaz de crear la partición EFI completa y con sus particion de recuperación, he abierto la caja y he desconectado físicamente el disco NVMe WD SN750 donde tengo instalado macOS. Estaría bien que la BIOS pudiera permitir desactivar un dispositivo en concreto, pero como no tiene esa opción, lo más seguro es desconectarlo.
Durante la instalación, elegimos instalación personalizada, eliminamos todas las particiones que existan en el disco y tras pulsar sobre "Nuevo" el sistema crea 3 particiones, la que denomina "Sistema" de 100MB es la partición EFI, luego hay una MSR (Microsoft Reserved Partition) y una "Principal" que es donde instalaremos el sistema.
En ese punto no veremos la partición de recuperación, pues la crea el instalador durante el proceso y tras instalar el sistema, podemos ver cómo quedan las particiones en el Administrador de discos, y ahí está la de recuperación, con un tamaño 510MB.
En el momento de la captura ya tenía conectado el disco de macOS (Disco 1) que tiene una partición EFI de 200MB y el resto es la partición de macOS Catalina y una segunda partición de 100GB para probar macOS Big Sur.
Un tema importante a tener en cuenta: Windows y macOS tienen una forma distinta de gestionar la hora del sistema, y si no hacemos nada, cuando volvemos a Windows después de haber estado en macOS, tendremos la hora cambiada.
Para resolverlo hay que hacer un ajuste en el registro del sistema usando Regedit, acceder a la rama HKEY_LOCAL_MACHINE\SYSTEM\CurrentControlSet\Control\TimeZoneInformation y crear un nuevo Valor DWORD (32 bit) con el nombre RealTimeIsUniversal y asignarle el valor 1.
Con este cambio, la hora de ambos sistemas será la misma.
En Windows he instalado todo mi software habitual y el rendimiento es espectacular. En test sintéticos como Geekbench las puntuaciones son muy altas, prácticamente idénticas a las que conseguiría con un i9-9900K en single-core, aunque menores en multi-core. A cambio, tengo un conjunto mucho menos exigente en refrigeración y con un consumo energético menor.
Los tests de AIDA64 también sirven para hacernos una idea de la potencia relativa,
Aunque lo verdaderamente importante son las sensaciones en el trabajo ordinario, y el salto con respecto a mi sistema anterior es muy importante, en buena medida gracias a la incorporación de un disco NVMe como el Samsung 970 EVO Plus, que tiene un rendimiento fabuloso.
Pero volvamos a lo más interesante, la instalación de macOS en mi Sagar Hozkatua, prácticamente finalizada.
Para tener un sistema perfecto - si es que eso existe en el mundo Hackintosh - es fundamental tener adaptadas al mundo Apple todas las tablas ACPI que describen los dispositivos al sistema operativo. Sin ese paso, puede que el sistema parezca que funciona y realmente lo hace, pero no lo hace todo lo bien que debería.
Y conseguirlo no es tarea fácil. Hay que extraer la información de la DSDT y las SSDT de las tablas ACPI, que están en formato binario, decompilarlas con iASL, revisar el contenido para realizar la adaptación - esto es lo realmente complejo - y volverlas a compilar para terminar con un único archivo DSDT.aml que recoge todo nuestro hardware tal y como lo querría ver Apple en un Mac genuino.
Así que he pedido ayuda a quien diría que es quien más sabe sobre esto en este planeta, el brasileño Mald0n, del foro de Olarila, quien ha revisado la configuración de mi sistema, y tras parchear la DSDT, mi carpeta ACPI solo contiene el archivo DSDT.aml y un archivo adicional SSDT-TB3HP.aml para gestionar Thunderbolt 3.
El resultado salta a la vista accediendo a "Información del sistema" y consultando la lista de dispositivos PCI. Ahí está casi todo mi hardware, perfectamente detectado y disponible para el sistema operativo de Apple.
Los dispositivos USB también se detectan perfectamente. He probado todos los puertos USB 3.0 y USB-C
Incluso los sensores se detectan correctamente y puedo usar iStats Menus para conocer las temperaturas del procesador, la gráfica y los discos. Solo echo de menos el sensor del ventilador,
La conectividad Bluetooth funciona correctamente y he emparejado mis AirPods usando Bluetooth y los servicios de iCloud.
La Radeon RX Vega 56 está perfectamente soportada, y aunque mi CPU no tiene una GPU interna, emulando a un iMac Pro consigo aceleración por hardware tanto en H.264 como en HEVC
Seguiré probando más cosas, ya que hay muchas cosas que verificar, pero de momento solo me he encontrado con dos pegas.
Estoy utilizando un teclado Logitech Craft y un ratón Logitech Marathon M70s, ya que el Master MX2 me dio un problema en el botón izquierdo, que quedó inutilizado, pero pude devolverlo. El caso es que el ratón hace algún extraño y se para de vez en cuando, como si se interrumpiera la conexión con el receptor Unifying que tengo conectado por USB.
Puede que no tenga que ver con macOS y sea un problema de interferencias, aunque en Windows apenas me pasa.
Y el segundo problema, que me preocupa un poco más, es que una vez se me ha quedado congelado el sistema, mientras hacía una prueba de Geekbench y al conectar un pendrive USB.
Estoy empezando a pensar que quizá sea un problema de hardware y voy a hacerle un chequeo completo a la memoria con memtest.
Ha sido el mismo congelado que me pasba con la BIOS F9i cuando hacía test de Geekbench y que ha desaparecido volviendo a la BIOS F9g.
Y un último tema que me queda por revisar, es el arranque múltiple. Quiero que el sistema arranque siempre desde Windows y tener seleccionado su disco como dispositivo de arranque en la BIOS, y seleccionar en el arranque con F12 si me apetece entrar en macOS.
Pero OpenCore quiere tomar el control y cuando reinicio el sistema tras haber entrado en macOS, ha cambiado el dispositivo de arranque en la BIOS para que sea OpenCore. Es un tema que tengo que revisar.
Por lo demás, encantado de cómo está quedando.